Piden la pena de muerte para los asaltantes de Gafsa
El juicio contra los sesenta implicados en el asalto armado a la localidad tunecina de Gafsa ha quedado aplazado hasta el sábado, en que debe iniciarse la actuación de los abogados de la defensa. El fiscal, Abdelaziz Hamzaui, ha requerido la pena de muerte contra 34 de los inculpados.La requisitoria del fiscal acusa a las autoridades libias de haber organizado y financiado la operación del comando tunecino que penetró en Gafsa, en enero pasado, procedente en parte de territorio argelino. Varios de los inculpados declararon que lograron transitar por Argelia provistos de pasaportes libios y en calidad de miembros de un equipo libio de fútbol.
Otros manifestaron que, tras haber sido entrenados en un campo llamado Jedaya, situado cerca de Trípoli, fueron enrolados en las filas de organizaciones palestinas y participaron en algunas operaciones realizadas por estas últimas en Líbano. La mayor parte de los acusados han negado que hubieran dado muerte a civiles o militares durante el asalto a Gafsa y justificaron su presencia por motivaciones de carácter económico.
Ahmed Mergheni, considerado como uno de los cabecillas del comando, circunstancia negada por él mismo, afirmó durante la audiencia que el objetivo de la operación era lograr el derrocamiento del régimen tunecino, al que calificó de impopular, aunque dijo luego que «tenía remordimientos por su participación en los acontecimientos».
En Túnez, el presidente Burguiba acordó ayer, con motivo de la festividad de la independencia tunecina, la libertad condicional a ocho de los catorce antiguos dirigentes sindicalistas que habían sido condenados, en unión del secretario general de la Unión General de Trabajadores Tunecinos (UGTT), Habib Achur, por su participación en la huelga general del 26 de enero de 1978 y en las sangrientas manifestaciones que la sucedieron.
