Golpe de Estado militar en Surinam

Un golpe militar, encabezado por dos sargentos, tuvo lugar ayer en Surinam, la antigua Guayana holandesa, con un saldo provisional de una decena de muertos y un número indeterminado de heridos, según informaciones procedentes de Paramaribo, la capital del país, recogidas en Caracas, Washington y La Haya.

Es el primer golpe de Estado que se registra en la antigua colonia holandesa, que obtuvo su indepenencia en noviembre de 1975. El primer ministro, Herick Arron, líder del Partido Nacionalista, que ganó la mayoría parlamentarie en las elecciones de 1977, fue derrocado ayer por la insurrección armada, sin que hubiera noticias de la suerte corrida por el dirigente político.Situada al sur del Caribe, entre la Guayana francesa y la República independiente de Guyana, Surinam tiene una extensión aproximada de 163.000 kilómetros cuadrados, una economía basada exclusivamente en las exportaciones de bauxita, una población inferior al medio millón de habitantes y, hasta ahora por lo menos, un régimen democrático y parlamentario. Unos trescientos militares participaron en la insurrección, de los ochocientos que forman las fuerzas armadas del joven país suramericano.

Un denominado Consejo Nacional Militar dijo anoche que dominaba totalmente la situación, y, justificó el golpe de Estado por las negativas del Gobierno a autoriza un sindicato militar. Las informaciones procedentes de Paramaribo, confusas e incluso contradictorias, indicaban anoche el triunfo de los insurrectos, tras ocho horas de lucha armada en el centro de la capital. El cuartel general de policía fue atacado con disparos de artillería desde una lancha patrullera, mientras que la comandancia del Ejército sufrió un ataque con armas automáticas y morteros.

Los principios democráticos serán respetados, según anunciaron los insurrectos, dirigidos por los sargentos B. E. Sital y L. Neede. Fuerzas insurgentes controlaban anoche el centro de la cpaital, las emisoras de radio y la sede del periódico De West, el principal del país, editado en lengua holandesa.

El malestar entre las fuerzas armadas de Surinam se inició hace un año, cuando el Gobierno negó un aumento de sueldos y una mejora de las condiciones, de trabajo en el Ejército. Algunos suboficiales se declararon en huelga hace algo más de un mes, por lo que no se les permitía la entrada en el cuartel general. Se procedió a la detención de varios dirigentes del movimiento reivindicativo y las sentencias de su procesamiento iban a ser hechas públicas hoy, martes, lo que fue impedido por la insurrección militar.