El primer secretario de la embajada soviética abandona hoy Madrid, acusado también de espionaje

El primer secretario de la embajada soviética en España, Anatoli Kasirnikov, saldrá de nuestro país en las próximas horas, a petición del Gobierno, inculpado en actividades de espionaje. Ayer abandonó Madrid el director de la compañía aérea soviética Aeroflot, Oleg Victorovich Suranov. Un portavoz de la embajada de la URSS en España manifestó a EL PAÍS que la delegación diplomática ha presentado una nota de protesta oficial ante el Ministerio. de Asuntos Exteriores español por la expulsión del primer secretario de la embajada, la segunda que se produce en sólo dos días.

Durante la conferencia de prensa habitual tras el Consejo de Ministros, el secretario de Estado para la Información, Josep Meliá, facilitó una nota acerca de la expulsión del director de Aeroflot. En ella se dice, entre otras cosas, que «diversos indicios -entre ellos un inusitado interés por temas relacionados con material técnico de aplicación militar- le hicieron sospechoso de pertenecer al servicio de información militar soviético (GRU), lo que motivó que sus actividades fueran controladas por el correspondiente servicio español».«Desde el verano», añade la información oficial, «se le observó un incremento anormal en sus contactos con personas ajenas a su actividad comercial, por lo que se le aumentó el control, que ha cristalizado en su detención cuando portaba material militar español, ajeno a los cometidos que oficialmente desarrollaba en España el señor Suranov.»

Meliá añadió, al dar cuenta verbalmente de esta nota, que «también con energía debo manifestar que no hay intereses ajenos a los españoles en la expulsión de este ciudadano soviético. Este desarrollaba una actividad contraria a los intereses nacionales, y por eso, tras los trámites legales, ha sido expulsado».

La misma comunicación precisa que este hecho no tiene relación con el descubrimiento de un supuesto almacén de material militar en Madrid, que pertenece a un chatarrero, con objetos procedentes de subastas de desecho que periódicamente hace el Ejército.

En relación con la expulsión, del director de Aeroflot en España, fuentes oficiales, al margen de la Secretaría de Información, aseguraron a EL PAÍS que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) norteamericana, pudo facilitar información a los servicios del contraespionaje militar español sobre determinados funcionarios soviéticos que realizaban actividades de espionaje y que parte del material confiscado a Suranov puede tener relación con aspectos militares de la defensa conjunta hispano-norteamericana.

Suranov abandonó ayer Madrid alas 15.25 horas, en vuelo a Varsovia de la compañía polaca Lot. Suranov fue conducido directamente desde las dependencias en las que se encontraba retenido hasta la escalerilla del avión. Las autoridades del aeropuerto de Barajas manifestaron tener órdenes de no permitir el paso a los periodistas a las zonas de tránsito de pasajeros.

Suranov es el segundo funcionario soviético de la compañía Aeroflot expulsado de España por actividades de espionaje. Anteriormente se aconsejó al Gobierno soviético que retirara de Madrid al responsable de tráfico de Aeroflot, Víctor Zaitsev, quien abandonó España a finales de 1978. Esta salida no fue hecha pública, pero ha sido confirmada a EL PAÍS en medios oficiales relacionados con los servicios de seguridad.

El Gobierno trató el tema del espionaje

Durante la conferencia de prensa, el portavoz oficial del Gobierno respondió a una pregunta de los informadores, en el sentido de que el Consejo de Ministros, en su reunión de ayer, había tratado de otro caso de espionaje por parte de un ciudadano soviético, pero se negó a hacer especificaciones sobre el tema. De acuerdo con la información obtenida posteriormente, este ciudadano es el primer secretario de la embajada, al que se ha hecho mención anteriormente.

También se ha sabido que el Gobierilo español dio un plazo de 48 horas al embajador soviético, Yuri Dubinin, para que optase por retirar al diplomático o arriesgarse a que oficialmente fuese declarado persona non grata y se procediera a su expulsión.

Se cree que el diplomático Kasirnikov abandonará España hoy, sábado, por la mañana, en el vuelo de las 8.55 de la compañía Aeroflot a Moscú.

En un momento de la conferencia,de prensa se preguntó al portavoz del Gobierno sobre la situación de las transferencias al Consejo general Vasco y, en concreto, sobré las acusaciones que Carlos Garaikoetxea ha hecho en este sentido al Gobierno.

Mellá respondió que, en su opinión, «estamos ante posturas electoralistas y ante el síndrome del lastre histórico del PNV y de algunos otros partidos de la oposición que quieren excusar sus propios errores atribuyéndoselos a otros».

«Es posible», añadió, «que estas transferencias pudieran haber sido más y más rápidas. Pero no es este el problema. El problema hay que plantearlo preguntándose ¿qué negociaciones han existido que hayan sido conculcadas y qué resultados se han obtenido que el Gobierno se haya negado a dar?; ¿qué capacidad negociadora se ha aportado sobre la mesa para poder negociar y alcanzar hechos y no posibilidades?».

Meliá prosiguió afirmando que, desde su punto de vista, se ha elegido el radicalismo verbal, porque se piensa que es rentable electoralmente. Algún día, alguien tendrá que hacer el endoso de responsabilidad por acusaciones sin fundamento.

Comentó entonces que algunas formaciones de oposición formulaban acusaciones generalizadas de corrupción hacia los ayuntamientos del régimen anterior: «¿Cuántas han podido demostrarse?», se preguntó. «Se decía que los ayuntamientos eran ineficaces y luego, con los ayuntamientos democráticos que no podían funcionar porque no había dinero. Tampoco lo había en la etapa anterior. ¿Por qué entonces criticarlos tan duramente?»

Por fin comentó que se hace frecuentemente una inversión de la carga de la prueba. «Es a quien acusa», dijo, «a quien corresponde probar aquello que afirma y es el PNV el que afirma y él que tiene que demostrar que le han dicho que no.» «Es el PNV», continuó, «el que tiene que decir qué cosas se han pedido y si se ha dicho no y por qué. Objetivamente el traspaso de competencias es un proceso muy largo, de algunos años, en el mejor de los casos. Lo que se tiene que decir, concluyó, es en qué escollo ha podido fracasar una negociación, con cifras y con números.»

En otro momento se le preguntó por las críticas que ha formulado «el segundo responsable de un partido» a la acción del Gobierno. Aunque el Rortavoz oficial no especificó el nombre del aludido -que con toda seguridad era Alfonso Guerra, vicesecretario general del PSOE- respondió que se trataba de actuaciones esperpénticas y que «la crítica de circo es para las acciones especializadas y no para un órgano tan serio como es el Gobierno».

En cuanto a los presupuestos aprobados para adquirir material de televisión en la cadena de UHF, señaló Meliá que se trata de medios para mejorar la infraestructura en algunos puntos del país, aunque no totalmente.