Garaikoetxea: "Las elecciones al Parlamento vasco son las más trascendentales de la historia de Euskadi"

El presidente del PNV, Carlos Garaikoetxea, calificó ayer, en Bilbao, las próximas elecciones al Parlamento vasco como las más trascendentales de la historia de Euskadi, en el acto de presentación de la candidatura del partido por Vizcaya y de las líneas generales de su campaña electoral en el País Vasco.

Xabier Arzallus, ex parlamentario y actual presidente del órgano ejecutivo de Vizcaya, se refirió a la importancia y significación que tiene para el pueblo vasco la existencia de un Parlamento propio, hecho que calificó como una «conquista histórica». «Por primera vez en la historia moderna de Euskadi», dijo, «una gran parte de los vascos va a poder verse directamente representada en un Parlamento y un Gobierno vascos, dos instituciones de autogobierno unidas por un eje, para intentar conducir a Euskadi a su reconstrucción y al renacimiento de su personalidad.»Fijó luego el señor Arzallus los tres retos fundamentales con que en su opinión, va a enfrentarse el futuro Parlamento vasco: superación de la grave crisis económica («que no es coyuntural», señaló), íntimamente ligada a una necesaria reconversión industrial, solamente posible a partir de una soberanía financiera; ordenación administrativa y recuperación del euskera y de la cultura vasca. «Estamos decididos», añadió Arzallus, «a solventar los problemas de Euskadi, entre ellos la búsqueda de la paz. Para encontrarla no hacen falta las armas cuando existen instituciones de autogobierno. La lucha contra el terrorismo hay que hacerla con las armas de la paz.»

Para Carlos Garaikoetxea, presidente del PNV, la existencia de un Parlamento vasco competente debe ser ocasión para demostrar que una Administración propia es más eficiente que la denostada Administración central.

De «azote» calificó luego el deterioro de la convivencia en Euskadi, «que crece por momentos. Es este un verdadero reto para las instituciones vascas. Si queremos poner remedio a esta violencia hay que ir a las raíces, sin escandalizarse ni adoptar posturas farisaicas. No podemos ignorar las causas que provocan la violencia en el País Vasco y, por ello, hemos de luchar desde el Parlamento para que las aspiraciones y derechos del pueblo vasco queden satisfechos. Vehículo para lograrlo es el Estatuto. Las instituciones vascas tendrán que velar para que se dé al mismo un desarrollo leal y cabal».

En la conferencia de prensa posterior al acto de presentación, Xabier Arzallus afirmó, a pregunta de un informador, que la crisis interna habida en el seno del partido en Vizcaya no perjudicará el resultado electoral de esta provincia. «El tema está superado de cara a las elecciones», señaló. «El sentido común ha imperado.»

Los portavoces del PNV fueron prudentes a la hora de referirse a posibles pactos y alianzas en la formación del Gobierno vasco. «Si logramos suficiente mayoría en el Parlamento, iremos a un Gobierno monocolor», aseguró Arzallus. «En otro caso estudiaremos, una vez analizados los resultados, la política de pactos. Para nosotros, la superación del problema institucional (creación de un estado nuevo), del económico (reconversión industrial) y del cultural (tratamiento del euskera, enseñanza y medios de comunicación) son objetivos urgentes. A la hora de fijar un programa de gobierno podremos llegar a pactos o acuerdos con quien ofrezca un mayor acercamiento a nuestros planteamientos con respecto a los tres problemas e citados y nos dé más garantías de colaboración y éxito en su resolución.»