Nuevas dificultades al referéndum andaluz
La entrevista celebrada ayer en Madrid por el consejero de Interior de la Junta de Andalucía y el vicepresidente segundo del Gobierno, Fernando Abril, fue una «auténtica humillación colectiva para el pueblo andaluz», según calificación dada por aquél a la conversación, en la que el vicepresidente comunicó que la Junta dispondría de 125 millones de pesetas para la campaña institucional del referéndum. Esta cifra es muy inferior a la solicitada por el organismo preautonómico.A su vez, parece que los ciudadanos andaluces que decidan acudir a las urnas el próximo día 28 podrían verse obligados a rellenar por sí mismos las papeletas de voto, ya que existe el proyecto de que estén todas en blanco. Rafael Escuredo, presidente de la Junta de Andalucía, criticó duramente tal posibilidad durante el acto de presentación de la campaña. «Estamos en el umbral de la desesperación», dijo, «y esta nueva traba lo sobrepasaría».
Los dirigentes de la Junta de Andalucía temen también que el Gobierno traslade a la región a un funcionario del Ministerio del Interior para «censurar la campaña preparada por la Junta». Rafael Escuredo ha manifestado que el organismo preautonómico que preside no está dispuesto a tolerar injerencias.
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