Plan de actividades culturales de la Confederación de Cajas de Ahorros
Proporcionar el conocimiento de las claves para la correcta interpretación del hecho cultural, facilitar a la sociedad la valoración de su patrimonio de cultura y, finalmente, servir como vehículo para el paso de una cultura de consumo a una cultura de participación son los ambiciosos fines del plan de actividades de la Confederación de Cajas de Ahorro, presentado el pasado viernes a la prensa, en una rueda que presidía el director general de esa entidad.
Este plan, confeccionado por un comité de once representantes de las once federaciones regionales de las cajas de ahorro, auxiliados por un grupo de asesores de los diversos terrenos culturales, es una serie de ofertas comunes, que se propondrá a las ochenta cajas de ahorro para formar parte de su actividad cultural de manera voluntaria.Tal vez lo más interesante del tema -según hizo notar el señor Saralegui, jefe de relaciones públicas de la Confederación- es la manera integradora y esencialmente didáctica en que se proponen estas actividades. En los distintos sectores -cine, teatro y danza, música, una tribuna pública de conferencias y coloquios y artes plásticas- se programa una serie de actividades que complementan el acto cultural en sí y que, pensadas con inteligencia y sensibilidad modernas, servirán para facilitar su comprensión a, por lo menos, tres niveles distintos.
Cada acto estará precedido por una exposición introductora, en el hall de entrada, que no requiere infraestructura, y que consistirá en una serie de paneles de distintos tipos, que además propondrán el juego, la participación individual mediante tests, preguntas, etcétera, Con el mismo criterio, un programa y guía didáctica será ofrecido con más posibilidades cuando se trata de obras que pueden girar por diversos locales y ciudades que si fueran de un solo acto. Y, por último, y para uso interior, cada actividad irá acompañada de un cuaderno del programador, en el que, además de explicaciones técnicas para los distintos montajes, se incluye información documental sobre los temas y sugerencias sobre las actividades complementarias que cada caja puede organizar alrededor, contando con especialistas locales o, en su defecto, invitando a otros, de los que se incluye también una lista.
El programa confeccionado para este año presenta, en teatro, la creación de una compañía profesional que pueda presentar montajes de cuatro obras de clásicos españoles, y que será dirigida, a nivel artístico, por José Monleón. En la sección particular de títeres hay un ciclo dirigido fundamentalmente al adulto, y en el que participan las principales compañías. En cine se ofrecen ocho ciclos de cinco películas cada uno, dedicados a Orson Welles. «la nueva ola francesa». Passolini. Taviani, Fritz Lang. Miklos Jancso, Buster Keaton y Harry Langdon, en los que se incluyen muchas películas desconocidas. De música, donde la programación es especialmente original -pensada por temas y, a partir de ahí, elegidos los intérpretes-, se ofrecen, entre otras actividades, los conciertos que llevan los siguientes títulos: Música de salón del siglo XIX. La polifonía, Los compositores actuales en percusión, Historia de la guitarra, La voz y el gesto y otros. En danza, cuatro compañías especializadas en distintos géneros, en la sección de tribuna pública, cuatro ciclos de cinco conferencias sobre temas generales. como La sociedad o Visión actual del Universo.
Un sector especialmente cuidado es el de las exposiciones, que se agrupan en tres grandes terrenos: las que dan a conocer las realidades y procesos del patrimonio artístico; las que informan sobre aspectos coyunturales y de actualidad, y las que se refieren a la extensión del arte actual. Por fin, en colaboración con el Ministerio de Cultura, la Confederación de Cajas de Ahorros pretende la instalación de una red de videotecas, con un fondo de copias en vídeo de más de quinientas películas, que permitiría, por una parte, la visión individual de especialistas, y, por otra, la posibilidad de verlas en público con la pantalla gigante de televisión.
Este programa está presupuestado en cerca de 230 millones de pesetas, el 10% de lo que las cajas de ahorro dedican a actividades culturales cada año. El plan, revolucionario en España, pero habitual en otros países, se considera experimental y por un año. Cuenta -como una parte voluntaria de la acción cultural de cada caja de ahorro- con la infraestructura de las cajas, que reúnen -aparte de lo contactos con medios exteriores- 340 salas de exposición, 250 salones de actos y ochocientas bibliotecas públicas en toda España.
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