Más de 2.000 personas protestan por la gestión del centro regional de TVE

Más de 2.000 gallegos, entre los que figuran algunas personalidades de la cultura, de la política y del arte, firmaron una carta de protesta contra la actual gestión de TVE en Galicia, responsabilizándola de tergiversar la información, ocultar la mayor parte de los conflictos que van conformando la historia del país y de despreciar la cultura y la lengua autóctonas.

El documento de protesta, que todavía sigue siendo firmado, mereció las adhesiones de escritores como Carlos Casares, Marino Dónega, Xesús Alonso Montero, Anxel Fole, Salvador García Bodaño y Rafael Dieste, artistas como Xaime Quesada, Acisclo Manzano, Ventura Cores y Xulio Maside; catedráticos de universidad como Carlos Alonso del Real, directores de medios de comunicación, arquitectos, médicos, profesionales de la enseñanza, obreros, etcétera.Consideran que a la luz de la reciente promulgación del Estatuto Jurídico de RTVE, en el que se otorgan competencias concretas a los equipos dirigentes de las televisiones regionales, «se hace especialmente necesaria la presencia de personas desligadas de intereses privados al frente de la futura televisión gallega».

De hecho, el escrito se muestra especialmente crítico hacia la actual dirección del centro regional de Santiago de Compostela, encabezada por Eugenio Pena, cuya dimisión ha sido ya pedida anteriormente en varias ocasiones, y al que se le acusa de haber originado una situación «que viene a resultar consecuencia lógica e inevitable de las estrechas ligazones que unen al equipo dirigente con empresas privadas, organismos oficiales y grupos económicos bien conocidos». Dentro de una buena parte de los mismos trabajadores de TVE en Galicia existe la impresión de que el centro de Santiago practicó información tendenciosa no sólo a favor de la política del Gobierno y de Coalición Democrática. sino también decididamente favorable para algunas empresas privadas, entre las que figura el holdin Barrié de la Maza. Según dichas fuentes, en algunos casos se hizo publicidad descarada disfraza da de información seudoperiodística, a la vez que se manipularon u ocultarbin noticias que no resultaban del agrado de estas empresas.

El escrito de protesta antes aludido señala a este respecto que. «convertido en propiedad particular por su director, el centro de Santiago actúa como una oficina de prestación de servicios publicitarios, en la que todos los compromisos personales tienen su salida». Según información obtenida por EL PAIS de fuentes contrastadas el funcionamiento del citado centro regional de Televisión engendró durante los últimos tres años no pocas Irregularidades administrativas en orden a contratación de personal y, sobre todo, a la gestión económica, que podrían constituir en algún caso hechos típicos de corruptelismo manifiesto. En la práctica catorce trabajadores del centro (técnicos y locutores) denunciaron el caso ante las autoridades laborales sin que TVE les haya contestado en ningún momento. Entre las posibles irregularidades económicas figura el abono de un alto porcentaje de horas extraordinarias que en los casos de personas ligadas al director, Eugenio Pena, no se prestan siquiera, o se ejecutan sin necesidad.

Resulta significativo comprobar, por otra parte, que entre los firmantes de esta protesta colectiva, hasta ahora la más importante que se ha realizado contra TVE en Galicia, aparecen nombres relacionados con todos los partidos políticos, incluso de Fuerza Nueva y de Alianza Popular o de la misma UCD.