_
_
_
_

Se agrava la situación en Corea del Sur

Un grupo de generales extremistas, que detuvieron a casi media docena de oficiales moderados, parecían convertirse en intermediarios del poder ante el nuevo Gobierno de Corea del Sur, que estaba intentando una apertura democrática.Estos generales, todos ellos firmes defensores del asesinado presidente Park Chung-Hee y su sistema autoritario, parecen estar actuando entre bastidores, con objeto de imponer su criterio conservador al nuevo presidente.

El embajador norteamericano, Wiliam Gleysteen, se reunió ayer con personalidades civiles y militares coreanas a fin de enterarles de la advertencia de la Administración Carter de que cualquier acción de los militares por turbar la tendencia del país hacia la democracia tendrá muy mal efecto en las relaciones coreano-norteamericanas. Un portavoz de la embajada rehusó nombrar a los reunidos.

Los conservadores dirigieron anteayer, miércoles, una sangrienta batalla de una hora de duración y detuvieron a los jefes de la ley marcial, general Chung Seung-Hwa y a otros diez altos mandos, todos ellos moderados, entre quienes se encuentran el jefe del tercer ejército y el de las fuerzas especiales.

El número de heridos se calcula entre cuatro y veintiocho, y entre ellos se cuenta el jefe de las fuerzas especiales, general de división Chung Byung-Joo, al parecer de gravedad. Según otras fuentes, habrían resultado muertos cuatro militares, y el ministro de Defensa, Ro Jae-Hyun, ha afirmado que el general Chung y otros militares fueron detenidos por haberse hallado nuevas pruebas contra ellos sobre el asesinato de Park,

Algunas fuentes afirman que los extremistas detuvieron a los moderados porque temían ser dados de baja en el Ejército por sus diferencias con el general Chung, y según otras versiones, les preocupaba que el país estuviese yendo demasiado rápidamente hacia la democracia y pretenden aminorar el ritmo de esta evolución.

Otro síntoma de la grave situación política que atraviesa el país lo constituye el envío, en la noche del miércoles al jueves, a la periferia de la capital surcoreana, de tropas blindadas normalmente estacionadas en la frontera con Corea del Norte.

Rumores sin confirmar indican que la presencia de estas unidades en las afueras de Seúl obedece a un intento de contrarrestar el peso de las divisiones mandadas por los cuatro generales moderados detenidos, todas ellas basadas en la capital, y que habrían permanecido leales a sus jefes. El movimiento de tropas desde el norte hacia Seúl no fue comunicado a las autoridades militares. norteamericanas de la zona, que, en teoría, tienen que autorizar tales desplazamientos.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_