La prensa francesa duda de los resultados de la visita de Suárez
La prensa parisiense de ayer comentaba ampliamente el final de la visita oficial del presidente Adolfo Suárez a las autoridades francesas y, con matices diferentes, la mayor parte de los comentaristas se preguntaban por los motivos de la «satisfacción total» que el día anterior expresó el señor Suárez durante la conferencia de prensa que ofreció en la embajada española.«La crispación que caracterizaba últimamente las relaciones entre los dos países ha desaparecido, pero ello no quiere decir que se hayan resuelto los problemas pendientes», anotaba el segundo canal de televisión. «Las relaciones París-Madrid, en pleno arabesco artístico», resumía el diario de ultraderecha L'Aurore, que subrayó la negativa rotunda del presidente español a informar sobre sus conversaciones con los responsables franceses a propósito del problema vasco. «Desde hace ya mucho tiempo», generalizaba este diario, «se nos ha acostumbrado a discursos templados sobre acuerdos de principio que nunca fueron ejecutados. Esto hace difícil aceptar como dinero contante y sonante los propósitos vagos concernientes a la identidad de puntos de vista y al clima enormemente positivo. »
El conservador Le Figaro discurre sobre «los límites de una entente cordiale» y sobre las dos ambigüedades que han caracterizado el planteamiento y el desarrollo de esta visita: por un lado, «Giscard, que va personalmente a discutir con la señora Thatcher de los corderos comunitarios, se manifiesta reticente para considerar como una cumbre su encuentro con el señor Suárez», a quien recibió rodeado de las delegaciones de ambos países. Por el lado español, el señor Suárez rechaza «privilegiar sus relaciones con un solo país europeo y, sobre todo, con Francia».
El diario independiente Le Monde destaca en su titular que «los jefes de Gobierno español y francés van a encontrarse, en lo sucesivo, una vez por año». El mismo diario confronta el optimismo oficial del final de la visita con las «reservas e inquietudes que manifestó la prensa madrileña hace algunos días». Un comentarista independiente afirmó que «en todo, pero más aún en política, cuando se habla tanto de sinceridad, como lo ha hecho el señor Suárez, es que se ha fracasado ».
Los comentaristas destacan generalmente la obstinación que manifestó el presidente señor Suárez, en su conferencia de prensa, para evadirse con habilidad o con negativas cada vez que se le interrogó con precisión sobre cuestiones claves, como la vasca, entre otras.
A ello hay que añadir la noticia que ha corrido en los medios periodísticos de París, según la cual el Gobierno español, la semana pasada, le subvencionó los gastos al primer canal de la televisión francesa para que se desplazara a Madrid a hacerle una entrevista al señor Suárez. Esto constituiría una manera muy peculiar, por el lado español, de entender el trato de «igual a igual» que, afirmó el señor Suárez, ha caracterizado sus recientes conversaciones con los dirigentes galos.
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