Mujeres en el desfile militar de la independencia marroquí

Diecisiete días después que Argelia, pero con más modestia de medios, Marruecos celebró ayer con un desfile militar, en la ciudad de Kenitra, el veinticuatro aniversario de su independencia.El rey Hassan II presidió la parada junto al príncipe heredero, Sidi Mohamed, y en una breve alocución a las nuevas promociones de oficiales, que fueron bautizadas con el nombre de «promociones Oued ed Dahab», dijo que «el Marruecos de hoy no perdona el estancamiento, la regresión, y sólo respeta a los que trabajan».

Como novedad, las unidades femeninas del Ejército marroquí fueron presentadas por primera vez al público. Las mujeres militares, poco corrientes en los ejércitos árabes, ya causaron sensación la semana pasada cuando fueron mostradas a la prensa formando parte del contingente de fuerzas especiales Uhud. Las principales ocupaciones de las mujeres marroquíes en el Ejército parecen estar relacionadas con las transmisiones.

En el desfile tomaron parte los aviones franceses Mirage F- 1 de la aviación real, que ya habían sido utilizados con éxito durante la batalla de Smara, hace cerca de un mes. Unas 30.000 personas acudieron a la ciudad de Kenitra para contemplar, durante los 45 minutos que duró el desfile, el paso de una representación de las distintas unidades de las FAR.

Las palabras del rey a los oficiales reflejan un estado de ánimo que empieza a extenderse entre una cierta élite política marroquí a favor del Ejército, considerado, por contraposición a los partidos y la Administración civil, como el único cuerpo que cumple sus obligaciones y se mantiene firme precisamente en la trinchera más dura.

La diplomacia y la Administración han sido fuertemente criticadas por una parte de la prensa del país en los últimos días. A la primera se le culpa por el aislamiento internacional en que se encuentra Marruecos. A la segunda, principalmente los medios de propaganda e información del Estado, se les acusa claramente de incapacidad y abandonismo y de rehusar las responsabilidades que les exigen sus funciones.