UGT asegura que una explosión de grisú causó el accidente de Caboalles

La federación provincial de UGT de la minería hizo público ayer, en León, un comunicado en el que acusa a la empresa Minero-Siderúrgica de Ponferrada, y a la Administración, de deformar la información sobre las causas del accidente que se produjo el pasado miércoles en el pozo María, de Caboalles de Abajo, localidad próxima a Villablino, en el que perdieron la vida diez mineros.

Tras señalar que la empresa impidió el acceso a la galería siniestrada -capa número trece- a los técnicos de UGT, con la connivencia de Comisiones Obreras, el comunicado insiste en que el accidente se debió a una explosión de grisú, descartada tanto por el Ministerio de Industria como por la empresa que explota la mina, en recientes declaraciones.

El comunicado afirma textualmente, respecto a la nota dada por el último Consejo de Ministros, en relación con el tema: «Nosotros, la federación provincial de mineros de UGT, decimos que el Consejo de Ministros miente, así como la empresa, ya que es indiscutible que varios cadáveres salieron de la mina con claras quemaduras, que fueron apreciadas por los trabajadores que participaron en el rescate de las víctimas. Y, por otra parte, la autoridad médica forense podrá atestiguar la certeza de nuestra afirmación. Aseguramos que hubo explosión, claramente escuchada por los mineros que trabajaban en otros puntos del interior del pozo María. Asimismo, la brigada de rescate pudo apreciar el humo que siguió a la combustión.»