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Las centrales sindicales auguran un "otoño caliente"

Dirigentes de las centrales sindicales UGT, CCOO, USO, CSUT y SU, encuestados por la agencia Efe, han coincidido en pronosticar para los próximos meses un otoño caliente en las relaciones laborales, que sólo se paliará mediante la negociación seria entre las partes.Para José María Romero, secretario de acción reivindicativa de UGT, «más que otoño caliente, va a ser un otoño muy dificil. Sin embargo, puede haber un elemento estabilizador,que sería el marco de relaciones laborales, caso de estar aprobado antes de que finalice el mes de octubre. Si esto es así y para esas fechas nuestro país cuenta ya con unas leyes laborales adecuadas, indudablemente se facilitarán algo las relaciones industriales».

Tras señalar que la acción sindical y la lucha contra, el paro serán los problemas más importantes a afrontar en los próximos meses, José María Romero afirmó que la postura de UGT frente, al próximo otoño es negociadora. «La grave situación económica exige una acción responsable por partqde todas las fuerzas implicadas. La revisión salaríal», dijo el dirigente ugetista, «no debe tener otra repercusión en la negociación del próximo año que tenerla en cuenta en el cómputo de la masa salarial de 1979.»

Julián Ariza, responsable de organización de CCOO, manifestó que, «vistos los problemas que tienen ante sí los trabajadores y sus organizaciones, conocido el tratamiento que el Gobierno y otros sectores de la patronal quieren dar a esos problemas, podemos afirmar que están creadas las razones para que la conflictividad en el otoño-invierno alcance una extensión y una profundidad poco frecuentes».

«Todo va a depender», añadió, «de si va o no a continuar la tendencia que se observa en cuanto a imponer las soluciones unilaterales y clasistas formuladas por el Gobierno, si se va a abrir a tiempo el camino de una negociación entre las partes y, desde el lado sindical, si vamos a ser capaces de comprender todos que la unidad de acción es indispensable.»

Ariza insistió en la necesidad de informar a los trabajadores y movilizarlos en torno al mantenimiento del poder adquisitivo, al estatuto de los trabajadores y demás leyes laborales, y en la lucha contra el paro.

Para Zaguirre, secretario general de USO, existen serias posibilidades de que el otoño sea caliente. «Para superar esas posibilidades», dijo, «se impone un generoso esfuerzo de negociación entre las fuerzas sindicales, económicas y políticas realmente implicadas.»

CSUT y SU, en boca de sus respectivos secretarios generales, Jerónimo Lorente y José Miguel Ibarrola, coinciden en que el otoño, a la fuerza, tiene que ser conflictivo. La pérdida del poder adquisitivo de los salarios, la actitud del Gobierno y la CEOE ante temas como el estatuto de los trabajadores o el patrimonio, abocan a ello. Ambas centrales van a propiciar una fuerte respuesta de los trabajadores

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