Predicación en masa de testigos de Jehová durante el día de hoy en Madrid

Hoy tendrá lugar una predicación en masa del «reino de Dios», llevada a cabo por parte de cerca de 12.000 testigos de Jehová, en las calles madrileñas. Durante tres horas, una cifra de individuos próxima a la cantidad señalada visitará comercios, plazas públicas, hospitales... de la capital madrileña, con el ánimo de «transmitir el mensaje de salvación».Miembros de esta agrupación religiosa, reunidos durante estos días en «asamblea» en numerosas capitales españolas, declararon a EL PAÍS que «tratamos de llegar a todas las personas de Madrid, dedicarnos a todos, porque el reino de Dios está a las puertas, se ha acercado, y el gobierno de Dios es la única solución a los problemas de la humanidad. Nosotros creemos en una teocracia, en un gobierno de Dios hacia la humanidad».

Precisamente ayer, el estadio madrileño del Rayo Vallecano fue el escenario de una de las ocho asambleas de distrito, Esperanza viva, que celebran los testigos de Jehová en España. La sesión dio comienzo con la presencia de unas 12.000 personas en la sesión inicial. El presidente, Jürgen Weyand, prologó la asamblea con un discurso en el que pidió a los asistentes que mirasen en derredor al auditorio y vieran a un pueblo que procuraba agradar a Jehová, el pueblo de Jehová. Subrayó también el señor Weyand la importancia de la vida familiar, diciendo que los padres deberían estar en cada sesión con sus hijos.

Rafael Raposo, de Madrid, pronunció, por su parte, el discurso de apertura, afirmando que «la esperanza de la creación está a la espera de ser realizada. Parece que no hay esperanza para la humanidad. Las masas esperan sin que haya razón para la esperanza ... » Pero afirmando también que «toda la creación humana está enlazada a una esperanza dada por Dios. Para toda la humanidad las perspectivas son entonces muy esperanzadoras».

En el mismo comunicado se afirma que «ninguna otra confesión, aparte de la católica, se ha hecho presente a estos efectos, y el Ministerio de Educación no puede proceder unilateralmente en un asunto que debe ser objeto de la cooperación entre el Estado y las diversas confesiones religiosas, como asimismo establece el precepto constitucional».