Moscú confirma su asistencia a la conferencia sobre refugiados

En la tarde de ayer fue confirmado en Ginebra el anuncio de Kurt Waldheim de que la Unión Soviética participará en la conferencia internacional sobre los refugiados de Indochina, que tendrá lugar en esta ciudad los días 21 y 22 de julio.Según un despacho de la agencia Reuter, desde Monrovia, Waldheim declaró a la prensa que había sido informado de la decisión del Gobierno de la URSS por el embajador de ese país en Angola, Vadim Loguinov.

Al respecto cabe recordar que la Unión Soviética no figura entre los países «formalmente invitados» a la conferencia de Ginebra por el secretario general de la ONU, quien, sin embargo, dejó las puertas abiertas a la participación de los países que se interesaran en el problema de los refugiados del sureste asiático, al declarar la semana pasada ante la prensa, en esta ciudad, que los Gobiernos que quisieran contribuir «serán bienvenidos».

Por otra parte, la embajada de Vietnam ante las Naciones Unidas anunció que hoy, a las 9.30 de la mañana, llegaría la delegación del Gobierno de Hanoi a la conferencia y que en el mismo aeropuerto Cointrin, de Ginebra, entregarán un comunicado a la prensa. Sólo entonces podrá aclararse la verda dera posición del Gobierno vietnamitá frente a la conferencia de los refugiados indochinos. Hasta ahora, los despachos de las agen cias internacionales dan cuenta de cierta «complejidad» en las posiciones del Gobierno de Hanoi, que, por un lado, se dice, exige una conferencia absolutamente «despolitizada», y por otro lado, de acuerdo con noticias más recientes, considera que deben analizarse en el seno de la conferencia los motivos exactos de la fuerte corriente migratoria de ese país, lo que, en otras palabras, significa dar cabida al debate político.

Posibie propuesta de Vietnam

De fuentes oficiosas se ha dicho que la delegación gubernamental de Vietnam, que vendrá presidida por un ministro, sin que se haya precisado cuál de ellos, propondrá la creación en territorio vietnamita de campqs especiales, donde los ciudadanos puedan recibir la ayuda internacional, evitando de esta manera el dramático éxodo masivo.Los últimos preparativos de la conferencia los está llevando un equipo de asesores de Kurt Waldheim, que preside el subsecretario general de las Naciones Unidas, señor Buffan, quien trabaja desde el lunes a puerta cerrada en una de las oficinas del Alto Comisionado para los Refugiados, sin acceso a la prensa y hermético muchas veces frente a sus mismos funcionarios, al parecer en espera de la llegada de Kurt Waldheim a Ginebra.