Federico Fellini,

el monstruo del cine italiano, está en guerra con sus compatriotas periodistas. El motivo del enojo es la negativa de Fellini a brindar entrevista alguna a la prensa italiana en relación con la película que está rodando en Cinecittá (La ciudad de las mujeres, con Marcello Mastroiani como actor central), mientras se sabe que en dos revistas francesas de próxima aparición saldrán fotografías del filme y declaraciones suyas. Los periodistas italianos han acusado a Fellini de «presuntuoso e intratable». El, a su vez, ha declarado: «Mientras filmo me vuelvo intratable, caigo en una especie de desvarío, no me reconozco a mí mismo. » La cosa hubiera quedado ahí (un genio es al fin y al cabo un genio) si no fuera por el mal servicio de su jefe de prensa (una francesa llamada Sofía). Ella ha dicho que Fellini sólo se aviene a conceder entrevistas a periodistas franceses «porque son más serios y tienen más charme».