UCD y CD "dan largas" al debate sobre el divorcio

El intento de los comunistas de plantear ya en el ámbito parlamentario, mientras el Gobierno decide su postura sobre el tema, un debate público sobre la introducción del divorcio en España, no ha tenido éxito por la oposición conjunta de Unión de Centro Democrático y de Coalición Democrática. Por dieciocho votos encontra (UCD y CD), y catorce a favor (socialistas, comunistas, Minoría Catalana y vascos), la Comisión de Justicia del Congreso de Diputados se opuso ayer a la toma en consideración de una estudiada propuesta legal del Grupo parlamentario Comunista sobre la introducción del divorcio en el Derecho Civil español y sobre la regulación de sus efectos civiles y económicos.

La propuesta comunista fue presentada por el diputado Josep Solé Barberá como el comienzo de una ,amplia y pública discusión de un problema vital, que responde a una situación gravísima a la que hay que dar salida. «En un Estado de Derecho», precisó Solé Barberá, «debe existir una salida legal y humana a esta situación, por lo que iina línea de ruptura del vínculo matrimonial es esencial.»El diputado comunista insistió en que la propuesta divorcista de su grupo parte exclusivamente de un análisis socio-político del actual momento español e intenta por todos los medios «caer en enfrentamientos religiosos o provocar un ambiente de apasionamiento». No hay nada que impida actualmente en España la. discusión pública de una ley de divorcio. Se trata, en definitiva, de abordar los problemas reales y de designar a los hechos por su nombre, sin buscar refugio en fórmulas jurídicas y éticas pretendidamente inmutables para impedir el planteamiento realista y constructivo de las soluciones jurídicas que hoy exige nuestra sociedad», concluyó su intervención el diputado Solé Barberá.

UCD, por boca de la diputada María Dolores Pelayo, se opuso a la toma en consideración de la propuesta comunista, por ser «una propuesta aislada, y no incardinada, en una estructura jurídica de mayor amplitud, es decir, el derecho de familia, en el que se contemplan otros aspectos como la patria potestad, la filiación, igualdad jurídica de los esposos y el régimen económico familiar». La diputada centrista insistió en que el Gobierno quiere poner al día el derecho de familia, pero no quiere hacerlo de manera improvisada y a salto de mata, sino de forma armónica y coherente.

La intervención de la diputada centrista fue calificada por el diputado Solé Barberá como la «canción de UCD que ya hemos escuchado muchas veces». En esta apreciación el diputado comunista fue apoyado por el diputado de la Minoría Catalana, Miguel Roca i Junyet, quien recordó que su grupo ya escuchó esta misma canción hace muchos meses cuando presentó una propuesta sobre la patria potestad, que a estas alturas no ha abordado todavía el partido del Gobierno. El diputado de la Minoría Catalana no dejó, por otra parte, de precisar que la oposición de UCD a la propuesta divorcista de los comunistas «cortaba la iniciativa legislativa, que debe ser ncontrario al principio de indisolubilidad que debe informar la estabilidad de la familia, pueda hacer más humana la vida familiar».

Los socialistas renunciaron a intervenir en el debate, si bien apoyaron con sus votos la propuesta divorcista de los comunistas. El Grupo Socialista tiene presentado un proyecto parecido al de los comunistas, aunque todavía no se ha debatido su toma en consideración por la Comisión de Justicia. UCD no tiene todavía un proyecto propio de ley de divorcio, si bien existe un borrador elaborado por la Comisión General de Codificación. Este borrador plantea un divorcio-sanción, mientras que los proyectos socialista y comunista suprimen el concepto de culpabilidad.