García Díez confirma la ralentización del crecimiento económico

El ministro de Comercio y Turismo, Juan Antonio García Díez, insistió ayer en afirmar que la actual política económica desarrollada por el Gobierno, centrada en la lucha contra la inflación, carece de alternativa posible en la actual coyuntura. La afirmación fue realizada en el curso del acto inaugural de la Feria Internacional de Barcelona, celebrado ayer. El ministro anunció también que el ritmo de crecimiento de la economía española se estaba desárrollando por debajo de las previsiones gubernamentales. Aunque no cuantificó este retroceso respecto a las estimaciones oficiales, el señor García Diez reconoció que como consecuencia del menor ritmo de crecimiento de la economía el paro se incrementará y, en general, la atonía económica será más importante de lo calculado para este año.El ministro de Comercio rehusó analizar en su discurso las perspectivas de la economía mundial y sus posibles repercusiones en la situacion española. «Es más práctico y más correcto», dijo, «ir hacia nuestros propios problemas, sin olvidar que hay un telón de fondo de una situación internacional, pero centrándonos en lo que son las preocupaciones de todos y cada uno de nosotros. »

El señor García Díez reconoció la falta de confianza empresarial existente y reiteró su defensa de la política monetaria como elemento sustancial de la lucha contra la inflación. En este aspecto, el ministro de Comercio reconoció que la aplicación de las restricciones monetarias había sufrido una cierta distorsión por el comportamiento de los sectores público y exterior; para este último, se refirió a las recientes disposiciones adoptadas en aras de incrementar su control, sin mencionar ninguna actuación concreta, presente o futura, para controlar el sector público.

En el acto inaugural de la 47 edición de la Feria de Barcelona intervinieron también el presidente de la Cámara de Barcelona, Josep María Figueras, y el alcalde de Barcelona, Narcís Serra. La actual edición del certamen ocupa una superficie de 36.600 metros cuadrados, de los que 6.300 corresponden a pabellones extranjeros. Como novedad, la feria incluye este año un stand representativo de la Comunidad Económica Europea (CEE).