Funerales por las víctimas de los últimos atentados

Cerca de 3.500 personas asistieron a la misa celebrada ayer en la iglesia de la Concepción de Madrid por el alma de las víctimas del atentado perpetrado el pasado sábado contra la cafetería California 47. La ceremonia prevista en el templo de San Ginés, por la Hermandad de Excombatientes, no fue autorizada por el arzobispado.El acto religioso había sido organizado por la propia parroquia de la Concepción, situada a escasos metros de la mencionada cafetería, y fue oficiada por nueve sacerdotes.

A la salida, los asistentes a la misa, entre los que se encontraba el dirigente falangista Raimundo Fernández-Cuesta, entonaron en posición firme y con el brazo en alto el Cara al Sol, escena que se repetiría unos quince minutos después. También se entonó el Oriamendi y Yo tenía un camarada, y se profirieron gritos e insultos contra el Gobierno, los Reyes y otras altas magistraturas del Estado.

En la basílica de San Miguel, de Madrid, se celebró a mediodía una misa por el eterno descanso del teniente general Gómez Hortigüela, asesinado el pasado viernes, junto a otras tres personas, en Madrid. Entre los asistentes al oficio religioso se encontraban los ex ministros del Ejército, tenientes generales Castañón de Mena y Coloma Gallegos.