El jefe del Estado francés, en Moscú
« ... ) Las relaciones comerciales franco-sovíéticas han sido una desilusión para París; se juzga que este desarrollo es el resultado de un enfriamiento político, y se espera que se inicie pronto una reactivación, un principio nuevo en el comercio recíproco. Elel lado político hay pocas perspectivas. Las propuestas francesas sobre el desarme han sido recibidas con frialdad en Moscú, y aunque los soviéticos Valoran positivamente el retorno de Francia a la Conferencía del Desarme, en Ginebra, la posición del Gobierno francés de no participar en la conferencia de Viena de reducción de tropas no ha variado.La postura de Giscard, pese a las acusaciones delos Comunistas, ha sido la de no aproximarse a la OTAN, lo que Moscú valora positivarnente, así como la reserva de Francia y su prudencia para jugar la carta china contra la Unión Soviética. ( ... )»
27 abril
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