Responsabilidad del PSA
El Partido Socialista Andaluz ha renacido, afortunadamente, gracias al apoyo de muchos miles de trabajadores andaluces que sienten en su carne cómo desde la Moncloa y tierras afines son apartados y condenados al olvido. Siendo esto cierto, el auge del PSA solamente puede explicarse por la alternativa que ofrece a los trabajadores andaluces. Por tanto, la evolución política del PSA no debe defraudar a tantos andaluces, porque sería la destrucción misma de un partido que ha penetrado muy lúcidamente en los orígenes de una explotación de siglos. Actualmente, la acción política de los dirigentes del PSA comienza a ser inquietante. Un partido por parte de los planteamientos de «rechazo de la sociedad capitalista, del imperialismo en su versión supranacional, que rechaza, en consecuencia, la explotación económica y la dominación política de unos pueblos desarrollados»; que afirma, además, en su primer congreso, que «la unidad democrática es un proceso vivo que hay que reafirmar y superar día a día en el curso de la acción». De un partido así, y viviendo además la realidad cotidiana andaluza, se debe esperar mucho. Por este motivo, quizá resulte superfluo recordar que, como partido marxista, debe tener muy en cuenta la cantidad progresiva de errores políticos, porque siguiendo así muy pronto esta cantidad se tranformará en una cualidad, y ésta no puede ser otra que arrastrar, a los trabajadores hacia la indiferencia, aparte del error histórico que supondría no haber actuado con la suficiente coherencia política para hacer avanzar a Andalucía. hacia el socialismo.
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