Reapertura de la factoría Nicas, de Valladolid

Hoy ha vuelto a abrir sus puertas, tras veintitrés días de huelga, la factoría vallisoletana de Nitratos de Castilla (Nicas), que tiene una plantilla de ochocientos trabajadores y está dedicada a la fabricación de abonos.Después de numerosas negociaciones y entrevistas del comité de empresa con el consejo de administración, domiciliado en Bilbao, ambas partes han llegado a un acuerdo. En principio, los trabajadores se opusieron a uno de los condicionamientos planteados por Nicas, referido a que los operarios se comprometieran a «mantener la paz social durante el presente año y a no reivindicar un aumento de la masa salarial mediante la huelga». La asamblea de trabajadores no aceptó esta petición por considerar que eso significaba renunciar a un derecho inalienable.

Finalmente, empresa y trabajadores llegaron a un acuerdo, ya que Nicas ha manifestado su disposición de negociar un convenio laboral que refunda las condiciones exigentes hasta este momento para sus relaciones de trabajo, pero sin repercusión económica alguna sobre la situación actual para 1979.

La parte social ha aceptado la no revisión de los salarios y ha prometido su colaboración para intentar superar la crisis por la que atraviesa Nitratos de Castilla. Una crisis que ha llevado a la empresa a presentar suspensión de pagos, asunto para el que ya han sido nombrados los interventores.

El conflicto de Nicas se inició hace veintitrés días, cuando la empresa se negó a negociar sobre el convenio de 1978 antes de hablar sobre el de 1979. El año pasado, a causa de la delicada situación económica de la fábrica, los trabajadores aceptaron un incremento provisional y mensual de 4.000 pesetas, pero a condición de que fuera revisado más adelante. Ante la nega,tiva patronal, los empleados se declararon en huelga y dos días más tarde Nicas respondíó con el cierre de la factoría y posteriormente presentó suspensión de pagos.