Un reo de muerte norteamericano rechaza la conmutación de la pena

Un condenado a muerte, que se opone a cualquier apelación contra la sentencia y asegura que prefiere morir a pasarse la vida en la cárcel, puede ser ejecutado en la silla eléctrica mañana, viernes, en el estado norteamericano de Alabama.John Louis Evans, de veintinueve años, es un convicto de asesinato que, durante el juicio, instó al jurado a pronunciar un veredicto de culpabilidad y dijo que volvería a matar si se le pusiera en libertad.

El caso tiene muchas analogías con el de Gary Mark Gilmore, que fue fusilado en Utah a principios de 1977, después de que exigiera su derecho a «morir como un hombre». La ejecución de Gilmore supuso la restauración de la pena capital en Norteamérica después de diez años. Desde la ejecución de Gilmore no se ha aplicado la máxima pena en Estados Unidos, aunque hay más de 470 reos en treinta estados condenados a muerte.

Después de que el Tribunal Supremo de Alabama rechazara varias apelaciones contra la sentencia, Evans tiene muchas posibilidades de morir mañana en la silla eléctrica. La madre del reo ha presentado una nueva apelación, en la que pide que se aplace la ejecución hasta que se estudie el estado mental de su hijo. Diversas organizaciones anti-pena de muerte, como la Unión Americana de Libertades Civiles y Amnesty International, han presentado recursos o solicitado clemencia para Evans.

El condenado, que dice haber vivido siempre del crimen, se declara contento de la proximidad de la ejecución y satisfecho de que las apelaciones hayan sido rechazadas. Evans amenaza incluso con asesinar a los miembros del jurado si se le conmuta la sentencia y algún día sale a la calle.

Por otra parte, el gobernador del estado de Kansas, John Carlin, vetó ayer una ley aprobada por el Congreso estatal que restauraba la pena capital. Los legisladores de Kansas había aprobado como método de ejecución la inyección de veneno a los condenados, en vez de la horca, que se utilizó por última vez en este Estado hace catorce años.