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Antonio Gutiérrez replica a Carrillo y defiende la unidad del PSUC

En el primer mitin organizado por el Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC) dentro de la campaña de las municipales, el secretario general de este partido, Antonio Gutiérrez, replicó ante unas cuatrocientas personas, a lo que calificó de «los cinco interrogantes» planteados en el informe que Santiago Carrillo presentó en nombre del comité ejecutivo del PCE al Comité Central del mismo partido. En su intervención, Gutiérrez se ciñó muy estrictamente a la valoración del resultado de las legislativas efectuado por el Comité Central del PSUC, lo cual equivale a decir que mantuvo sobre este particular unos criterios claramente diferenciados del PCE, mientras reafirmaba el carácter catalán del PSUC.

Respecto a los socialistas defendió repetidamente la idea de llegar a una unidad. «Hay que poner el énfasis. no en la lucha contra los compañeros socialistas, sino en la lucha por la unidad con los compañeros socialistas». A lo que agregó que el actual PSC-PSOE «no es el mismo que era antes de la fusión».Criticó duramente a la UCD («que se ha dado unas pinceladas de catalanidad con el retorno de Tarradellas, al que han comparado a Cristóbal Colón»), mientras aludía críticamente a la actual Generalidad provisional, de la que afirmó que «no sabemos cómo tirar adelante» y a la que calificó de «enfangada». Afirmó que había que luchar contra las diputaciones provinciales y que existía una «España centralista que aún tenemos hoy en día y contra la que hay que combatir».

Calificó al PSUC de partido independiente, con su propia historia, «ligada a la revolución de octubre». Replicó al análisis efectuado por Carrillo, según el cual el PSUC habría perdido su imagen eurocomunista. «Un signo -dijo- de un partido eurocomunista es que haya debate. Lo de «leninista» y «banderas blancas» es maniqueismo de pacotilla. Hay debate (en el seno del PSUC) y hay síntesis. El PSUC está sano y fuerte, y un síntoma de ambas cosas es el debate, el cual no nos hace perder votos, pero si nos hiciera perder votos no lo esconderíamos (el debate)». Esta última afirmación recibió grandes aplausos.

Los partidos políticos catalanes iniciaron ayer la primera jornada de la campaña electoral para las próximas elecciones municipales con idéntica tónica que en las pasadas elecciones generales. Ello equivale a decir en un clima de frialdad, lo cual ha posibilitado que el ciudadano medio no captara que la carrera hacia los ayuntamientos se había iniciado ya.

Hay que destacar, sin embargo, la actividad de los socialistas del PSC-PSOE. A las doce de la noche del domingo, los dirigentes socialistas, con su alcaldable a la ciudad de Barcelona, Narcís Serra, al frente, celebraron una fiesta.

En el curso de la misma, Narcís Serra recordaría a sus correligionarios el programa municipal socialista, advirtiendo que si bien empezaban la campaña bailando, su entrada en el ayuntamiento no iba a ser «un paseo triunfal».

Por lo que respecta a la actividad de los restantes partidos, cabe señalar el regreso a Barcelona de Carlos Güell de Sentmenat, quien ha estado viajando por París, Bruselas y Munich.

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