El Ejército chino carece de movilidad
Las operaciones de China en Vietnam han demostrado la máxima militar de que unas tropas sin movilidad, por la escasez de elementos motorizados, no pueden acabar con rapidez y facilidad una campaña.El Ejército chino, superior numéricamente al vietnamita, en cuanto a hombres, armas y carros de combate, no ha podido alcanzar una victoria definitiva por la pasividad de su máquina militar.
La invasión ha demostrado, como manifestó un miembro del Buró Político del PC chino el pasado sábado, que las tropas de Pekín no están equipadas para una guerra moderna. El viceprimer ministro, Deng Xiaoping, también lo comentó durante su visita a Estados Unidos el mes pasado. En esa ocasión declaró que «la capacidad militar defensiva de China era limitada» para hacer frente a un conflicto.
Hay una coincidencia de expertos militares norteamericanos con expertos europeos y de la OTAN de que, al margen de la propaganda, no hay evidencia militar de que China haya ocasionado un daño especial al Ejército vietnamita.
Sin embargo, en algunos aspectos la invasión china sí ha servido de «lección» de los vietnamitas en el terreno militar. La conquista de Lang Son, y otras cuatro capitales de provincia, así como la destrucción de instalaciones que podría utilizar Hanoi para hostigar la retirada china, conviene tenerse en cuenta al enjuiciar la acción bélica de Pekín. Contando además con las fuertes pérdidas económicas que la devastación de la frontera supone para Vietnam.
No hay ningún indicio de que China pueda solucionar en poco tiempo los problemas de movilidad de sus tropas. Aunque los programas de modernización del Gobierno de Pekín tengan en cuenta este punto, puede decirse que hasta dentro de diez años China no tendrá capacidad para motorizar convenientemente a sus fuerzas.
