Oreja y Rodriguez Sahagún, en el País Vasco, renuncian a los mítines y prefieren los carteles
Marcelino Oreja, ministro de Asuntos Exteriores, y Agustín, Rodríguez Sahagún, titular de Industria, candidatos número uno de UCD, respectivamente, por Guipúzcoa y Vizcaya, son los dos miembros del Gabinete Suárez que tropiezan con mayores dificultades para el desarrollo de su campaña electoral. Los dos han optado por renunciar a reuniones o mítines con asistencia libre, y basan su propaganda, fundamentalmente, en un gran despliegue de carteles y anuncios en la prensa y radio.Los dos están rodeados por fuertes medidas de seguridad, hasta el extremo de que se mantiene en secreto el domicilio del señor Oreja en San Sebastián. Los corresponsales de EL PAÍS en Bilbao y San Sebastián, Javier Angulo y Antonio González informan sobre las características y condicionantes bajo los que se desarrolla la campaña electoral de ambos ministros.
Marcelino Oreja ha trasladado su cuartel general a la capital guipuzcoana, en donde reside de tres a cinco días a la semana. Se sabe que se hospeda en un domicilio párticular, pero la organización centrista prefiere mantener en el secreto el lugar exacto, de acuerdo con las instrucciones recibidas del equipo encargado de velar por la seguridad del ministro.
La impotencia de la UCD donostiarra para realizar actos públicos con un mínimo de resonancia -impotencia reconocida por el propio partido- ha conducido a los centristas a la utilización espectacular en toda la circunscripción electoral de los medios clásicos de propaganda: los carteles y los anuncios en la prensa. Sin duda alguna, el partido gubernamental es la organización política que mayor despliegue propagandístico ha efectuado en las calles de San Sebastián, pero el esfuerzo se ve frustrado, en parte, por el hecho de que todos los días un importante número de carteles centristas aparecen destrozados.
En Vizcaya, una auténtica avalancha de carteles, páginas de periódicos y cuñas de radio aconsejan a los ciudadanos votar a Agustín Rodríguez Sahagún. El ministro de Industria, que se instaló hace dos semanas en un hotel de Bilbao, simultanea su campaña con asuntos propios del departamento, lo que provoca constantes críticas de otros sectores políticos, para quienes la propaganda del candidato centrista se está basando en su condición de ministro.
Agustín Rodríguez Sahagún no es, sin embargo, un candidato pasivo. Ha visitado casi todos los pueblos de la provincia (los periódicos recogen estas visitas en una página diaria pagada, con fotos del ministro bebiendo «chiquitos» y jugando en el frontón).
Por la noche, instalado en su hotel, Agustín Rodríguez Sahagún se toma unos whiskies con personas relacionadas con la industria y periodistas. En el hotel. se encuentra a menudo con el socialista Txiki Benegas, con quien parece mantener relaciones cordiales, y con Luis Olarra, a quien elude.
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