Más de 700 muertos en Irán en el cuarto día de gobierno islámico
El cuarto día de gobierno islámico revolucionario se saldó ayer en Irán con más de setecientos muertos durante graves enfrentamientos en la ciudad norteña de Tabriz entre tropas leales al sha Reza Pahlevi y grupos de combatientes de izquierda y separatistas de la región de Azerbaijan. En Teherán, numerosos civiles armados atacaron anteanoche la embajada de Estados Unidos y detuvieron durante varias horas al embajador y a sesenta diplomáticos y empleados de la representación.
Anoche, presuntos miembros de la disuelta policía secreta del sha (Savak) atacaron el edificio de la radio y televisión iraní, en la capital. Tras casi una hora de tiroteo fueron repelidos por fuerzas leales al nuevo Gobierno.El líder religioso ordenó ayer que el próximo sábado concluyan las huelgas en todos los sectores. La última ola de paros, organizada hace un mes por orden de Jomeini, paralizó completamente el país y ha provocado una gran inquietud en Europa y Estados Unidos, privados de los suministros de petróleo iraní por tiempo indeterminado.
Portavoces de Jomeini señalaron anoche que la producción petrolífera, que en octubre del año pasado, antes de los movimientos masivos contra el Gobierno del sha, era de casi seis millones de barriles diarios, se normalizará en los próximos tres o cuatro meses. Sin embargo, el secretario norteamericano de Energía, James R. Schlesinger, acaba de expresar sus enormes dudas sobre la normalización de la producción.
En la mayor parte de los medios occidentales se cree que Irán entrará ahora en un largo período de inestabilidad política, durante la cual los grupos extremistas de izquierda y derecha intentarán apoderarse de la dirección del país.
Los combates librados ayer en Tabriz y en Teherán alimentan esos temores y sugieren que el Gobierno del primer ministro Bazargan no ha conseguido controlar aún la situación. La envergadura de la lucha en Tabriz, que se desarrolló en varios sectores de la ciudad, obligó incluso a la aviación a intervenir.
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