El emperador iraní, un huésped incómodo para Marruecos
La visita del sha de Irán a Maruecos es, por el momento, un secreto bien guardado por las autoridades en Marrakech, la capital provisional del reino alauita. El va y viene de los automóviles oficiales suntuosos y negros es incesante, pero nada trasciende de la estancia del sha ni de sus propósitos, aunque se confirma que por el momento no viajará a Washington.El protocolo real marroquí, abordado por algunos periodistas que se han desplazado a esta ciudad, afirma ignorarlo todo sobre las intenciones del matrimonio imperial iraní, porque «ello sólo depende de su propia majestad imperial».
La lluvia y el mal tiempo impiden al sha una actividad turística vistosa en estas bellas regiones del sur marroquí y quizá no pueda hacer turismo como en Asuán. Por otra parte, la fría acoalda que se le ha dispensado, al menos públicamente parece sugerir que el huésped aparentemente incómodo, permanecerá poco tiempo en este país.
Existe, sin embargo, una invitación del presidente egipcio, Anuar el Sadat, para que regrese a Egipto, y alguna prensa, escéptica, ha comentado que con tanta solicitud como muestra, el presidente Sadat parece confiar en que el sha pueda invertir en viejos proyectos una parte de su inmensa fortuna. A nadie escapa que el, casi ya exiliado emperador dispone de una fortuna personal superior al presupuesto de muchos Estados del mundo.
En Marruecos, donde los acontecimientos en Irán fueron aprovechados por la oposición para formular advertencias premonitorias y de paso exigir una mayor democratización y, por qué no, una parcela de poder, la estancia del sha evidentemente no causa entusiasmo.
Los estudiantes de la Universidad de Rabat protestaron ayer por la visita a Marruecos del sha de Irán, Moh,amed Reza Pahlevi. En la facultad de Letras se produjeron intentos de manifestación.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
El Bernabéu señala a Vinicius, pitado tras ser sustituido contra el Sevilla
El tren interoceánico con 148 pasajeros choca en México con un tráiler sin dejar heridos
Un récord para Mbappé en la noche del desencanto del Bernabéu con el Real Madrid
La Real Sociedad ya tiene nuevo entrenador: Pellegrino Matarazzo
Lo más visto
- Uno de los promotores de la señal V-16 de tráfico: “Es duro oír el testimonio de víctimas que han sufrido amputaciones al poner los triángulos”
- Cae una organización que enviaba camiones cargados de cocaína desde Marbella hasta varios países europeos
- Más de 40 congresistas demócratas piden por carta a Trump que cese en sus “intentos de socavar la democracia en Brasil”
- La policía registra varios domicilios y las oficinas de la ministra francesa Rachida Dati por otro presunto caso de corrupción
- La Administración de Trump publica solo una parte muy censurada de los papeles de Epstein, aunque la ley le exigía difundirlos “todos”




























































