Rehabilitación en el Piramidón

El artículo aparecido el pasado sábado día 9 de diciembre, referente al funcionamiento del servicio de rehabilitación del Centro Ramón y Cajal, entraña implícitamente conceptos peyorativos y absolutamente erróneos para el resto de los especialistas en rehabilitación y, por ende, para los demás servicios de la especialidad ubicados en otros hospitales.Titula el articulista J. A. M. que «Treinta minusválidos han sido expulsados del Piramidón por una decisión burocrática», que más adelante precisa en los siguientes términos: «La dirección del centro ha decidido crear un nuevo servicio de rehabilitación, el de hidroterapia, y para dotarlo de personal han designado a uno de los tres fisioterapeutas que componían el equipo aludido, con lo que este queda desmembrado, en lugar de ser potenciado, como pedían ellos mismos y los pacientes que atienden.» A continuación esgrime una serie de datos y argumentos que pretenden demostrar lo absurdo de tal decisión, y que van a ser el objeto de esta réplica, por lo que entrañan de erróneos, tendenciosos y ofensivos; no pretendiendo nunca, por nuestra parte, incidir en la ya mencionada «decisión», que, por ser de régimen interior de un centro ajeno al nuestro, no nos compete.

Expone el articulista las «excelencias del equipo de fisioterapeutas del Ramón y Cajal, no sólo en su tratamiento puramente médico, si no en el humano». Opinión discriminativa de entrada, al omitir a los médicos rehabilitadores, y a la cabeza de los mismos, al jefe del servicio, doctor don Roberto Pastrana, aunque más adelante haga mención del doctor Alcázar, pues deficiente tratamiento médico van a aplicar aquéllos sin las prescripciones previas de éstos. Continúa J. A. M. afirmando: « En el caso que nos ocupa, el servicio de rehabilitación lo lleva el doctor Alcázar, y el equipo lo integran los fisioterapeutas Luis Funes, Francisco Domínguez y Javier García.» Afirmación tajantemente errónea, pues el doctor Alcázar desempeña el cargo de jefe de sección y nunca el de jefe de servicio, que en dicho centro única y exclusivamente obstenta el doctor Pastrana, antes mencionado. Más adelante es posible leer comentarios tan gratuitos, jocosos e inciertos como los siguientes:

«Son expertos (alude al equipo formado por el doctor Alcázar y los tres fisioterapeutas antes citados) que han desterrado el uso de fármacos, el uso de aparatos mecánicos...»

« ... el servicio de neuro del Ramón y Cajal acoge a alguno de los casos más difíciles de España y entre sus pacientes se encuentran algunos que han sido objeto de estudios internacionales por su rareza.»

«Enfermos que habían sido prácticamente desahuciados en los servicios de rehabilitación de otros hospitales han sido curados en el Ramón y Cajal.»

«En la mayoría de los hospitales se intenta que el paciente recupere el uso de las partes de su cuerpo afectadas; piernas, brazos o manos, por ejemplo, pero en su función puramente utilitaria. El equipo del doctor Alcázar procura, además, que se acostumbren a no incurrir en vicios de posturas que delatan claramente su condición de disminuidos físicos...» Afirmaciones, todas ellas, que vomitan ( ... ) desconsideración para otros centros hospitalarios, servicios de rehabilitación, médicos rehabilitadores y fisioterapeutas en general, más aún si se considera que el citado «equipo de administración de salud y bienestar» procede del servicio de rehabilitación de la Ciudad Sanitaria La Paz, donde colaboraron con el resto de los componentes del mismo, dejando constancia de su buen quehacer profesional, pero nunca de habilidades que rayan en 16 milagroso; cuando, además de las afirmaciones técnicas arriba -reseñadas pueden confundir el criterio del profano y de la opinión pública, pero jamás al residente menos iniciado de cualquier servicio de rehabilitación, y de ahí su gravedad.

Que no sirva este texto como argumento para poner en entredicho el correcto funcionamiento del servicio de rehabilitación del Centro Ramón y Cajal, pues sabemos de la capacidad profesional tanto del jefe del mismo, doctor Pastrana, como de sus colaboradores, incluido el doctor Alcázar y su grupo de fisioterapeutas, con el que nos une una antigua y firme amistad.

Jefe de Sección. Departamento de Rehabilitación. Ciudad Sanitaria La, Paz y veinticinco firmas más correspondientes a médicos rehabilitadores de las Ciudades Sanitarias La Paz y Primero de Octubre,