Nuevo paso de EEUU hacia la fabricación de la bomba de neutrones

El presidente Carter ha ordenado la producción de ojivas y otros elementos esenciales para la bomba de neutrones, pero todavía no ha tomado una decisión definitiva sobre la construcción en serie de la nueva arma atómica, según se informó oficialmente ayer en Washington.

Con el visto bueno presidencial, Estados Unidos dio un paso más hacia la fabricación y despliegue en Europa de la polémica arma, que destruye la vida y afecta escasamente al entorno físico. Sin embargo, queda abierta la posibilidad de que el presidente Carter pueda suspender definitivamente el programa de construcción de la bomba de neutrones.Una información aparecida ayer en el diario Washington Star revelaba la decisión de Carter de permitir la producción de algunos elementos de la bomba-N. Más tarde, el Departamento de Estado confirmó la noticia e indicó que la decisión definitiva dependerá de las muestras que dé la Unión Soviética de restricción de su poder militar en Europa del Este.

Dudas sobre la reacción soviética

De hecho, la situación no ha variado en lo esencial desde el pasado mes de abril, cuando Jimmy Carter aplazó indefinidamente la toma de una decisión definitiva respecto de la bomba. Pero en Washington existe la duda de si los soviéticos van a interpretar el visto bueno del presidente a la fabricación de piezas de la nueva arma como una clara intención de seguir adelante con la bomba de neutrones.Aunque la polémica bomba es un arma táctica, que se utilizaría esencialmente en el centro de Europa para combatir a los tanques soviéticos, no se descarta la posibilidad de que una decisión favorable a su producción pudiera afectar a las conversaciones SALT II sobre limitación de armas estratégicas.

La decisión sobre la fabricación de elementos de la bomba fue tomada la semana pasada, en una reunión del Consejo Nacional de Seguridad norteamericano. El presidente Carter informó personalmente al premier británico, James Callaghan, y al canciller de Alemania Federal, Helmut Schdmit.

Los científicos del Pentágono comenzarán, por tanto, a fabricar las ojivas especiales para el misil táctico Lance, que en su día podrán albergar la carga de neutrones y los proyectiles especiales para la artillería, que también podrán disparar las cabezas neutrónicas. Se calcula que el programa de producción tardará dos años y costará entre 650 y 950 millones de dólares.

Los misiles serán instalados en Europa

Tanto los misiles Lance como las cápsulas de artillería preparadas para recibir la carga neutrónica serán instaladas en Europa y, hasta que haya una decisión definitiva, serán cargadas con material fisionable. Esto permitirá que las cabezas sean rápidamente sustituidas por las de neutrones en caso de que el presidente norteamericano dé la aprobación definitiva al proyecto.Carter, que no pudo conseguir una aprobación unánime de sus aliados europeos a la bomba de neutrones, encuentra en el Congreso decididos partidarios de la nueva arma, quienes ven en ella un excelente elemento de disuasión. Otros, por el contrario, estiman que la bomba de neutrones sólo sirve para acortar el umbral atómico y que su utilización supondría una guerra con armas nucleares.