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Israel logra impedir una negociación "paralela" sobre Cisjordania y Gaza

Israel no oculta su malestar ante los intentos egipcios de ligar, con el apoyo tácito de Estados Unidos, las conversaciones sobre el tratado de paz entre dos países con el porvenir de Cisjordania y Gaza.

Aquí se señala también que Washington está presionando discretamente » sobre Jerusalén para que el Gobierno del primer ministro Menahem Beguin tome algunas «medidas unilaterales» en Cisjordania y Gaza con el fin de alentar a los palestinos moderados a respaldar el proyecto de autonomía para la zona, previsto en los acuerdos de Camp David.Según el diario Maariv, independiente, de orientación nacionalista, la delegación israelí en Washington ha conseguido hasta ahora impedir la iniciación de la negociación «paralela» exigida por los egipcios sobre ese tema.

Las medidas sugeridas por los norteamericanos a Jerusalén incluyen la liberación de cierto número de presos palestinos y la autorización para que se realicen mítines palestinos en Cisjordania y Gaza, como el efectuado ayer en Belén.

Las autoridades israelíes han suavizado ya diversas disposiciones militares en los territorios ocupados. Así, el ministro de Defensa, Ezer Weizman, ha ordenado recientemente que se permitan reuniones privadas o «cerradas» de líderes sindicales e intelectuales palestinos, durante las cúales se ha podido discutir libremente el plan de autonomía, e incluso publicar declaraciones hostiles al régimen de autonomía.

En otro gesto de buena voluntad, Weizman ha anulado muchos decretos de expulsión contra personalidades palestínas, firmados por su antecesor en la cartera de Defensa, el laborista Simon Peres. Entre los dirigentes palestinos favorecidos por la iniciativa de Weizman, todos ellos cercanos a la OLP (Organización para la Liberación de Palestina, de Yasser Arafat), se encuentra el doctor Ahmed Hamzeh Natsche, de tendencia izquierdista, muy popular y respetado en la región del Hebrón y de Belén, expulsado hace dos años.

Israel ha tomado también otra medida de «suavización»: el arrendamiento de siete hectáreas, expropiadas tras la guerra de 1967, a la población árabe de Jerusalén.

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