Un pesquero onubense, ametrallado cuando faenaba en aguas saharianas

Al mediodía de ayer llegaron a Las Palmas dos de los tres tripulantes heridos en el tiroteo que sufrió la noche del jueves el pesquero onubense Génesis, cuando faenaba a seis millas de Cabo Leven, frente al Sahara mauritano.

Uno de ellos, Juan Martín San Ginés, fue desembarcado muy grave en camilla, pues una de las balas le atravesó el vientre. Los heridos llegaron a bordo del destructor de la Armada Lepanto, que se desplazó al lugar de los hechos unas horas después del ataque llevado a cabo, según todos los indicios, por miembros del Frente Polisario.También a bordo del buque militar llegó otro de los heridos, Fernando Martín, con algunos rasguños producidos por el roce de las balas, quien relató que la acción se produjo aproximadamente a las once de la noche: «Acabábamos en ese momento de las faenas diarias y nos disponíamos a subir el aparejo a bordo; de repente, cuando todos estábamos tan tranquilos, sonaron disparos, que vinieron a estrellarse contra nuestro barco. Nos refugiamos como pudimos en diferentes lugares, y a partir de ese momento la lluvia de balas se prolongó durante un buen rato.» El marinero herido dijo también que la mayor parte de los tripulantes, catorce en total, lograron refugiarse adecuadamente, aunque otros corrieron menos suerte, como el joven San Ginés, que lo dejaron malherido.

El marinero prosiguió diciendo que las balas no fueron más que un aviso y que a continuación dispararon una potente bomba que estalló al lado de uno de los camarotes: «Aquello pudo ser el final para todos nosotros.» Los agresores, una vez arrojada la bomba, huyeron, y, según el capitán del barco, único que logró ver a los agresores, dice que se trataba entre seis y siete personas que llegaron en una lancha neumática.

Todos estos indicios hacen suponer que la acción fue llevada a cabo por guerrilleros del Frente Polisario, tanto por la zona en que se produjo la agresión como por la forma en que se llevó a cabo. Algunos incluso relacionan este ataque con el perpetrado en la madrugada del miércoles contra el pesquero surafricano en las mismas proximidades, suceso que arrojó el dramático balance de seis pescadores muertos. Dada la escasa diferencia de tiempo entre uno y otro atentado cabe suponer que pudieron ser los tripulantes de la misma lancha neumática los que llevaron a cabo la acción.