"Desconocemos la situación en que se encuentran las viviendas oficiales"
El nombramiento de Luis Laorden Jiménez como nuevo delegado provincial de la vivienda apareció publicado en el BOE el pasado 7 de septiembre. El cese del anterior, Carlos Tutor -quien ahora ha vuelto a la empresa privada-, fue acordado en el Consejo de Ministros del 25 de agosto. Las razones del cambio según el nuevo titular obedecen a que «es un puesto ingrato, que quema mucho. Ha habido además una reestructuración y unos cambios generales, las razones concretas no las sé».Luis Laorden, como su antecesor, viene de la empresa privada. Los últimos tres años ha estado vinculado a una empresa textil barcelonesa. Es doctor ingeniero de Caminos y profesor de Ingeniería y Urbanismo en la Universidad de California. Es madrileño -«así no dirán que desconozco los problemas de Madrid»-, está casado y es padre de cinco hijos. Tiene 37 años.
Uno de los temas más peliagudos que tiene planteados la Delegación es el descontrol existente entre las viviendas construidas con protección oficial. Las ocupaciones de pisos vacíos, por un lado, y las constantes denuncias de viendas sin utilizar son datos que reflejan esta situación. «Eso es cierto, pero como tarea inmediata nos hemos propuesto realizar una investigación a fondo sobre las viviendas que se encuentran en situación irregular: tanto de las que hay vacías como de las que se han ocupado en circunstancias, digamos extrañas. Para esto, no bastará una simple comprobación administrativa ni física. Hacer frente a la picaresca obliga a ir hasta el fondo. Por eso, si es necesario, recurriremos a personal especializado.»
«La investigación tendrá un valor ejemplar»
Sin embargo, la noticia recogida recientemente, en la que se decía que ese personal especializado serían detectives privados, se presenta a los ojos de muchos como un recurso desmesurado e innecesario. «Insisto -dice el nuevo delegado- que sólo se recurrirá a los detectives cuando se encuentren síntomas de evidente irregularidad. Hay casos en los que han encubierto la situación con unos montajes increíbles, ante los que con la razón en la mano legalmente no se puede hacer nada. Entonces, nosotros creemos que por medio de una investigación de este tipo podremos conseguir pruebas de la irregularidad y resolver el tema.»
Madrid cuenta con un total de 90.000 viviendas de carácter oficial. Por extraño que parezca, sus administradores, en este caso la Delegación Provincial de la Vivienda, desconocen la situación exacta en que éstas se encuentran. «Hacer un censo sistemático en el que se recoja la situación de las viviendas va a ser una tarea lenta, porque hay que visitar las 90.000 viviendas una por una. Por eso, contar con un censo claro va a ser un trabajo más lento que la investigación de las irregularidades. Todo esto tiene de importante que la investigación va a resultar ejemplar, además de que dispondremos de viviendas que podrán ser utilizadas por gentes necesitadas.»
Sin embargo, esas investigaciones fueron también anunciadas por los dos últimos delegados, sin que hasta el momento se conozcan, al menos públicamente, resultados,positivos. «Yo creo que antes si se investigaba -asegura el delegado-. De hecho hay una serie de expedientes de desahucios y expropiaciones. Lo que pasa es que todo este proceso tiene que desarrollarse dentro del marco de la legalidad y ello implica caer forzosamente en el ritmo de una lenta tramitación. Hay, además una gran escasez de personal para realizar las investigaciones.»
«La ocupación es ilegal y abusiva»
La Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos, FPAV, también anunció el pasado año su intención de realizar el citado censo y de presentar un informe en la Delegación. «Los datos presentados por la FPAV son irregulares. Tienen presentada unal ista de 101 denuncias. La Coordinadora Carabanchel nos trajo hace tres días una lista de 134. Aparte, nosotros tenemos un centenar de casos.»
El tema de las ocupaciones de viviendas en Madrid todavía está pendiente de solución. Las declaraciones hechas desde el Ministerio de Obras Públicas han sido confusas. «Las ocupaciones son algo ilegal, abusivo y es un tema en el que ha habido manipulaciones.» Sin embargo, al ser preguntado sobre quiénes son los que han manipulado y dirigido las ocupaciones, su respuesta fue que «es algo que ha salido en la prensa. También los periódicos han dicho que había intereses políticos por medio». De cara a solucionar este problema que se arrastra en Madrid desde hace más de un año, el delegado contestó que disponen de un catálogo en el que se recogen los casos urgentes. «Tenemos una lista de 1.500 familias cuya situación es límite y según vayan progresando las investigaciones podremos acomodar a muchos en los pisos vacíos.»
Luis Laorden asegura que tanto el poner orden y esclarecer el patrimonio de la Delegación como las obras a emprender por medio de convenios con el Ayuntamiento -«ellos harán la lista de prioridades y nosotros actuaremos, pero hay poco dinero»-, el problema de la vivienda en Madrid debe resolverse dentro de un marco de política general. Sobre las líneas generales de esa política respondió: «Definir esa política no nos corresponde a nosotros. Estamos aquí para ejecutar, no para decidir. Si quiere mi opinión personal, diré que creo que hay que hacer diferentes tipos de vivienda según los distintos tipos sociales: unos requieren una mayor atención por parte del Ministerio que otros. Hay que pensar en los que pueden ser propietarios de viviendas y en los que no pueden ser más que inquilinos. Aquí se abre el gran interrogante. He estado estos días recorriendo los pueblos de la provincia con el gobernador civil y he sacado la conclusión de que el problema no es solamente construir viviendas, sino que éstas deben estar en núcleos urbanos debidamente equipados. Una dotación de servicios suficiente puede suponer una desviación de la población hacia esas zonas. Creo que la vivienda en sí no es el objetivo, lo es la felicidad.»
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