_
_
_
_

Hua Kuo-feng critica en Belgrado el "hegemonismo" de la URSS

Tras el violento ataque lanzado anteanoche por el jefe de Gobierno chino contra el «hegemonismo» soviético, Hua Kuo-feng y el presidente yugoslavo Josip Broz Tito continuaron ayer sus conversaciones en Belgrado, orientadas, según se anunció, a reforzar el movimiento de países no alineados y a desarrollar nuevas relaciones económicas entre China y Yugoslavia.Las referencias de Hua al «hegemonismo» de la Unión Soviética, más duras aún que las hechas por el dirigente chino la semana pasada en Rumanía, han sido contestadas por Tito con evidente, moderación, sin alusión alguna que pudiera interpretarse como crítica directa o indirecta a Moscú.

No obstante, la agencia oficial yugoslava,Tanjug, señaló en un comentario que Pekín y Belgrado son partidarios de «la eliminación de todo aquello que conduzca a la desigualdad entre naciones o pueblos, o que derive en diversas formas de dominación y hegemonismo».

En la cena oficial que anteayer le ofreció el presidente Tito, Hua Kuo-feng acusó a la Unión Soviética, sin citarla, no sólo de practicar una política «hegemónica», sino también de intentar dividir al movimiento de países no alineados. Elogió además la disposición de Yugoslavia a luchar «contra cualquiera que trate de invadir su territorio». Durante su discurso, Hua se refirió indirectamente en tres ocasiones a la Unión Soviética, a la que también acusó de haber iniciado una «loca carrera armamentista» y de estarse preparando para la guerra. En cambio, en Bucarest dedicó sólo una cita al «hegemonismo» de Moscú.

Por su parte, Tito destacó las «conquistas» sociales de la revolución china, a las que aparentemente comparó con las del sistema autogestionario de su propio régimen. Dijo también que la amistad chino-yugoslava promoverá la distensión internacional y «consolidará la paz». Expresó, finalmente, su preocupación ante la rivalidad de las superpotencias, y urgió a la lucha contra los últimos vestigios de colonialismo, y el racismo.

Ayer, una multitud de cerca de 300.000 personas ovacionó a Hua y a Tito cuando ambos se dirigieron, en coche descubierto, al edificio de la presidencia del Gobierno yugoslavo, en el centro de Belgrado, donde se efectúan las conversaciones. De estas reuniones participa, junto a Tito, Stane Dolanc, considerado su posible sucesor político y muy conocido por su posición crítica frente a la Unión Soviética.

Según indicó recientemente la revista francesa Le Point, durante la entrevista mantenida por Tito con el presidente Leónidas Brejnev en Belgrado, en noviembre de 1976, el dirigente soviético le pidió a Tito, por esa causa, que Dolanc no interviniera en las conversaciones.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Hua permanecerá en Belgrado .hasta el próximo día 29, en que emprenderá viaje a Teherán.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_