Fanfani amenaza con separarse de la Democracia Cristiana italiana
Amintore Fanfani, el único «caballo de raza» democristiano que queda en la DC después de la desaparición de Moro. anunció ayer que no asistirá hoy al consejo nacional del partido. que deberá nombrar al sucesor de Moro.El anuncio lo hizo mediante una carta de veinte líneas dirigida a Zaccagnini que se ha transformado en la noticia política del día. Fanfani no sólo no participará de este consejo, que sigue con particular interés toda la clase política, sino que ha amenazado en su carta con «decisiones aún más graves» si sus compañeros de partido no toma en su ausencia «una actitud más responsable».
Ya en otra ocasión. cuando Andreotti se opuso en 1975 a su nombramiento como presidente del consejo nacional. Fanfani amenazó con abandonar la Democracia Cristiana e incorporarse al Grupo mixto del Senado.
El actual presidente del Senado dice en su carta que prefiere no asistir al consejo nacional de la DC porque se vería obligado a «contestar duramente a algunos colaboradores de Zaccagnini y a varios miembros del Gobierno». Zaccagnini telefoneó inmediatamente a Fanfani pidiéndole que desistiera de su propósito. Pero fue inútil.
Por qué Fanfani muestra esta actitud en un momento tan delicado para su partido. Lo cierto es que desde hace tiempo Fanfani soportaba con muchas dificultades la nueva política de la DC de diálogo con el Partido Comunista. Como ya indicamos Fanfani estaba criticando duramente el Gobierno Andreotti en el momento en que llegó a la reunión de los máximos dirigentes de la DC la noticia del hallazgo del cadáver de Moro. Durante todo el secuestro del dirigente, Fanfani se mantuvo más cerca de la familia Moro y de los socialistas que de la secretaría de su partido. En estos últimos días durante un congreso de intelectuales democristianos en Saint Vicent, Fanfani tuvo palabras muy duras para el grupo de Zaccagnini y también para Andreotti hasta el extremo de que algunos comentaristas consideraron su intervención como una autocandidatura a la Presidencia del Gobierno.
Pero su ataque de ayer a la secretaría no sólo no fue muy escuchado. sino que en realidad cayó en el vacío. Así demostró el hecho que incluso el grupo doroteo, el principal adversario de Zaccagnini en el último congreso que lo eligió secretario acaba de aceptar la política de la secretaría apoyando el nombramiento de Flaminio Piccoli, que es uno de sus hombres, como presidente del consejo nacional en sustitución de Moro. Prácticamente Fanfani constituye hoy la única oposición seria a Zaccagnini. Pero los observadores, sostienen que nunca estuvo más aislado porque incluso sus compañeros de grupo han anunciado su voto favorable a Piccoli.
Granelli, que fue siempre uno de los políticos más cercanos a Moró, dijo ayer a Paese Sera que en realidad Fanfani acaba de repetir su juego de siempre: «Cuando se impone en el partido una línea que él no defiende o a la que se opone, levanta la voz y amenaza.»
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.