La Diputación aprobará la adquisición del hospital de Maudes

La Diputación Provincial aprobará en su próximo pleno, el día 26, la adquisición del hospital de Maudes, situado en las cercanías de la glorieta de Cuatro Caminos, y que está destinado a convertirse en la nueva sede de dicho organismo. El acuerdo de adquisición menciona que la Diputación se hará cargo del edificio «en su estado material actual, con todos sus anejos y libre de cargas, mediante permuta con el centro que la propia Diputación tiene ya construido totalmente en la localidad de Navalcarnero, y que estaba programado para residencia de ancianos».

La permuta, además del centro mencionado, incluye la cantidad de 190 millones de pesetas, que se pagará en varios plazos.Una vez que el pleno apruebe la adquisición, se seguirán los trámites necesarios para la formalización documental. Aún no se ha decidido el destino de la actual sede de la Diputación, el palacete de Miguel Angel, 25, aunque, dadas las características artísticas y de perfecta conservación del edificio, la intención del señor Castellanos, presidente de la Diputación, es que se le destine a un fin noble como pudiera ser el de residencia de invitados ilustres.

Con la aprobación de la permuta -el señor Castellanos se ha negado siempre a designar la operacion como de compraventa- queda prácticamente cerrada la polémica que en los últimos meses enfrentó a la Diputación y al Servicio de Fundaciones con las asociaciones ciudadanas y entidades privadas, entre ellas Adelpha. Estas últimas se oponen a la adquisición argumentando que la fundación del hospital de Maudes, concebido en principio para la atención sanitaria de los obreros sin recursos, no cumple sus fines desde hace años, por lo que la obligación de la Administración sería cancelar la fundación y hacerse con su patrimonio. Es decir, el hospital en sí. De esta forma, argumentan, la adquisición del edificio para la sociedad sería gratuita.

Por su parte, tanto la Diputación como el Servicio de Fundaciones exponen que no hay posibilidad legal de llevar a cabo esa desafectación. La Diputación insiste en que el edificio, construido en 1916 por el arquitecto Antonio Palacios, va camino de la ruina y que la única forma de evitarla y de lograr su restauración es que un organismo tipo Diputación se haga cargo del mismo. Se calcula en unos setecientos millones el presupuesto de las obras de restauración y acondicionamiento.

Parece ser que también este factor juega en la falta de decisión de la Administración central, y concretamente del Ministerio de Cultura, ante la posibilidad de quedarse con el hospital. Ningún ministerio quiere hacerse cargo de un edificio que requiere tal presupuesto de acondicionamiento.