Ben Bella se encuentra peor que cuando estuvo preso en Francia

La liberación del ex presidente argelino Ahmed Ben Bella, preso en Argelia desde el mes de junio de 1965, la exposición de sus actuales condiciones de confinamiento, los pasos dados por sus abogados y por distintas organizaciones internacionales para lograr su liberación y la creación de un comité de personalidades españolas para apoyar su puesta en libertad, son algunos de los aspectos tratados en una reunión organizada el pasado miércoles en Madrid, por la entidad humanitaria Amnesty International.Con motivo del trece aniversario del apresamiento por las autoridades argelinas del primer presidente de Argelia, Ahmed Ben Bella, que desde el 19 de junio de 1965 permanece detenido sin haber sufrido proceso judicial alguno, Amnesty International celebró un acto en un colegio mayor madrileño para exponer las gestiones realizadas con objeto de lograr su inmediata liberación. Esta organización humanitaria hizo suyo el caso Ben Bella hace algunos años.

En el acto intervino la señorita Madeleine Lafue Veron, abogado del político argelino durante veinte años, quien expuso sus actuales condiciones de confinamiento. Según sus testimonios, Ben Bella se encuentra encerrado en un caserón situado a unos cuarenta kilómetros de Argel, junto con su mujer Zohra Sollami y dos hijas adoptivas. De este inmueble, únicamente ocupa una zona reducida, ya que el resto es utilizado por la numerosa guardia que le custodia en total unos doscientos soldados, suboficiales y oficiales.

La señorita Lafue-Veron indicó que las ventanas de la casa permanecen cerradas y que Ben Bella tiene prohibido usar el jardín de la casa. Sus paseos se limitan al espacio de un patio interior de unos veinte metros cuadrados de superficie. En las dependencias que ocupa, existen micrófonos y un circuito cerrado de televisión que registra todos sus movimientos y capta hasta el más leve suspiro. No puede enviar ni recibir cartas, ni tampoco la visita de sus abogados. Sus parientes allegados tienen muy restringidas sus visitas al preso, que se realizan de modo ocasional.

Siempre según los testimonios de su abogado, se le impidió ser intervenido quirúrgicamente en el oído interno por el especialista español doctor Olaizola, que se brindó a cumplir todas las medidas cautelares impuestas por las autoridades argelinas con tal de conseguir operar al paciente.

En líneas generales, la letrado calificó las condiciones actuales de Ben Bella como peores, respecto a las que sufrió en los distintos penales franceses en los que el líder argelino permaneció recluido durante la guerra franco-argelina.

Señaló asimismo, que todas las gestiones realizadas ante el Gobierno de Argel sobre la liberación de Ben Bella han resultado infructuosas. En un principio, se negaba su apresamiento y posteriormente, se ha llegado a decir que se encontraba tan agradablemente en su «residencia vigilada que no quería abandonarla. Estos testimonios le fueron confiados al dirigente del PSOE, Felipe González, durante una de sus visitas a Argel.

Para la abogado Lafue Veron, el confinamiento de Ben Bella es un verdadero enterramiento en vida, únicamente modificable por la presión internacional.

Por su parte, Amnesty International señaló que se había constituido en nuestro país un grupo dedicado especialmente al asunto Ben Bella. Como presidente de dicho grupo, que está formado por intelectuales, políticos y personalidades españolas, fue elegido el escritor Juan Goytisolo. Entre las adhesiones enviadas al acto organizado por Amnesty se encontraban las de Joaquín Ruiz Jiménez. Fernando Arrabal, Ramón Tamames y Roberto Mesa.