Larga pena de cárcel para terroristas anticubanos
El fiscal del tribunal militar ordinario de Lisboa pidió ayer una pena de veinticuatro años de cárcel contra los autores del atentado contra la embajada de Cuba que costó la vida, en junio de 1976, a dos funcionarios cubanos.
El fiscal militar también consideró probadas las alegaciones de la acusación contra el comandante Mota Freitas, que dirigía la policía de seguridad de Oporto en el momento de los atentados y que es acusado de haber suministrado a los terroristas armas y explosivos, además de una garantía de poder obrar sin peligros.
Después de más de tres meses de sesiones, está llegando a su fin el proceso llarmado «de la red bombista». Se espera que la sentencia sea leída la próxima semana.
La «red bombista», desmantelada a principios de 1977, se cree que está ligada a los medios de derecha y extrema derecha. Los diecisiete acusados, actualmente sentados en el banquillo, responden de cerca de cuatrocientos atentados a la bomba contra locales sindicales y políticos de izquierda, instalaciones públicas, representaciones diplomáticas de países socialistas o coches particulares de militantes de izquierda, perpetrados entre el verano 75 y la primavera del 76.
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