El PC italiano perdió el 9% de sus votos en las elecciones administrativas
Toda la atención política de Italia estuvo ayer centrada en el análisis del resultado de las elecciones administrativas parciales, que ha dado bastantes sorpresas. Todos habían otorgado a estas elecciones un gran significado político por el hecho de que se celebraban inmediatamente después del asesinato de Aldo Moro. Se sabía también que el voto sería en gran parte emocional. Pero nadie esperaba, como dice Corriere della Sera, resultados «tan sorprendentes».
Se esperaba que los electores premiarían esta vez a la Democracia Cristiana, pero no en tal medida. Desde hacía treinta años la Democracia Cristiana no obtenía el 40% de los votos. Y sin embargo, ha logrado el 42,5%, contra sólo el 37,5% de anteriores administrativas. Es el único partido que ha aumentado también en relación con los comicios de 1976; entonces consiguió el 38,9%. Toda la prensa reconoce que hoy en Italia la DC es, sin discusión, el gran partido del país.Otra sorpresa la ha dado el Partido Socialista de Bettino Craxi. La actitud «humanitaria» de este partido para salvar la vida de Moro había sido duramente criticada y se esperaba que los socialistas pagasen fuertemente lo que La Malfa, el líder republicano, había calificado de «aventura peligrosa». Sin embargo, los socialistas, que en 1972 fueron derrotados, es el partido que más ha aumentado: ha pasado del 9,2 % al 13,5 %, y mantiene el mismo porcentaje de las últimas administrativas, cuando aún el PSI tenía un buen puesto en el cuadro político italiano.
Lo que nadie se esperaba fue el resultado del Partido Comunista, que ha disminuido su triunfo respecto de las elecciones del 76, cuando había alcanzado su máximo del 35,6 %.
En efecto, ha perdido casi el 10% porque ha obtenido sólo el 26,5%. En cuanto a las administrativas del 72 ha mantenido prácticamente el mismo número de votos. Es verdad que el PCI normalmente gana más votos en las políticas que en las administrativas, pero, como comenta toda la prensa, una diferencia de este tipo no se la esperaba nadie.
Otro dato importante es que aumentan ligeramente los partidos intermedios: republicanos, socialdemócratas y liberales, mientras se derrumban los partidos de la ultraderecha, como el MIS y la DC (Democracia Nacional), separada últimamente del MIS. La ultraizquierda del PDUP y de DP ha obtenido también un resultado insignificante.
Los primeros comentarios son muy cautos. Ni siquiera la DC se ha lanzado a demostraciones triunfalistas. Los socialistas se muestran abiertamente contentos con este resultado, que prueba que la política del último congreso de Turín, en el cual el PSI lanzó el desafío de un nuevo camino «autónomo» del PCI, es una política premiada por los electores.
Aparece el "hermano metralleta"
Entretanto, Silvano Girotta, conocido por el apodo de «hermano metralleta», se presentó ayer, inesperadamente, como testigo del fiscal en el juicio que se les está siguiendo en Turín a Renato Curcio y otros «jefes históricos» de las Brigadas Rojas. Girotta dijo que concurrió al tribunal por «un imperativo de conciencia contra estos criminales que imponen, incluso en el proceso, una atmósfera de terror».La mayor parte de las acusaciones contra los brigadistas se basan en declaraciones efectuadas por Girotta. No obstante, el ex guerrillero, cuya colaboración con las autoridades permitió la detención de Curcio y otros terroristas, desapareció recientemente de Turín, tras haber dejado una cinta grabada con sus acusaciones. Su presencia ahora ante el tribunal puede resultar decisiva.
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