Schmidt preparará con Callaghan las próximas "cumbres" occidentales

El canciller federal alemán llega hoy a Londres para discutir durante dos días con el primer ministro británico los preparativos de las próximas cumbres occidentales: la de la CEE. en Bremen. a comienzos de julio y la de las siete naciones más industrializadas. en Bonn, una semana después. Las conversaciones Callaghan-Schmidt, sin embargo no serán solamente económicas. como lo demuestra la presencia en el equipo alemán de los ministros de Asuntos Exteriores v de Defensa. La reunión anglo-germana se desarrollará en la casa de campo del primer ministro. en Chequers, aunque el lunes el pleno de las dos declaraciones se reunirá en el número 10 de Downing Street, donde los señores Callaghan y Schmidt comunicarán en rueda de prensa los resultados de sus entre vistas. Tanto por parte británica como alemana estarán presentes en la reunión los «pesos pesados» de los Gobiernos respectivos: Hacienda. Finanzas Y los diplomáticos y militares citados. Londres y Bonn están interesados en poner a punto medidas que contribuyan a la recuperación de la economía internacional, pero difieren sustancia ¡mente en la política que debe sera plicada. Mientras. los alemanes están convencidos de que Estados Unidos no pueden de tener la hemorragia del dólar y sus efectos desastrosos en el equilibrio monetario mundial. los británic0s no están dispuestos a apoyar ningún arreglo monetario que se circunscriba a Europa y margine a la divisa norteamericana.

Schmidt quiere despegarse del dólar

El canciller Schmidt considera que Europa debe tomar la iniciativa ahora y comenzar a despegarse del sistema monetario dominado por el dólar mediante el diseño de una nueva relación entre las monedas de la CEE, destinada a hacer de Europa «una zona de estabilidad monetaria». La idea, defendida también por Francia en la última reunión del Mercado Común, en Copenhague. tiene el apoyo entusiasta del presidente de la Comisión Europea, Roy Jenkins, quien viene clamando desde hace meses por un nuevo sistema, basado en una unidad europea de cuenta y en la noción de unión monetaria de la CEE.

Inglaterra. por su parte, no está dispuesta a aceptar ninguna iniclativa «anti-americana». Callaghan Y su canciller del ex chequer, señor Healey. están convencidos, o así lo proclaman. de que Washington asumirá sus responsabilidades como potencia que respalda a la moneda reserva del sistema monetario cuando Europa tome medidas para relanzar su economía y estimular su crecimiento. Y su obsesión es convencer a los alemanes de que asuman el liderazgo de la lucha contra la recesión.