"EI periodismo de investigación, antídoto contra la corrupción"

«El periodismo de investigación es un fenómeno informativo que debe darse en cualquier sociedad porque todos los gobiernos y centros de poder político o social se encuentran con la corrupción que suele acompañar al poder.» Para Clark R. Mollenhoff, premio Pulitzer (1957) de periodismo y profesor de la Escuela de Periodismo de Washington y Lee University, que pronunció una conferencia en el Centro Cultural de Estados Unidos sobre el Periodismo de Investigación en Estados Unidos el pasado lunes, este tipo de periodismo es una de las formas más eficaces de controlar los abusos o desvíos de las zonas de poder de la sociedad.En Estados Unidos el periodismo investigativo alcanzó una nueva dimensión a raíz de los artículos, y posteriormente libros, de los periodistas del Washington Post, Woodward y Bernstein, que investigaron él caso Watergate. La fama alcanzada en todo el mundo por los dos reporteros del Post provocó un aluvión de solicitudes de matrículas en las escuelas de periodismo en Estados Unidos.

Sin embargo, no son muchos los auténticos periodistas de investigación que gozan de fama en la actualidad en Estados Unidos. Según el profesor Mollenhoff existe la tendencia en cada periódico a destinar los esfuerzos del editor o de un delegado de cada editor y de dos periodistas a la práctica seria de este periodismo. En Washington existen unos quince reporteros de este tipo que están bien preparados. El profesor Mollenhoff estima que, aunque la práctica de este periodismo es vital para la sociedad, no es menos necesaria la preparación de estos periodistas investigadores. Su dedicación requiere una gran cantidad de conocimientos a fondo sobre las estructuras del Gobierno y la disposición de las leyes y estructura de empresas y organismos públicos, además de la capacidad de análisis de cada periodista y su aplicación correcta a los hechos.

El profesor Mollenhoff, premio Pulitzer 1957, concedido por su labor de investigación sobre los chantajes e intrigas dentro de determinados sindicatos que luego ayudarían a las investigaciones del Congreso, ha criticado la utilización de la fuente Garganta Profunda en el caso Watergate. «Técnicamente, la utilización de esa fuente no fue muy correcta porque probablemente esa Garganta Profunda no era una prueba directa, sino de segunda o tercera mano. Sin embargo, Woodward y Bernstein supieron compensar ese defecto practicando una investigación sistemática, lo que les condujo a excelentes resultados.»

«El periodismo de investigación se practica fundamentalmente como antídoto contra los abusos del poder político, pero también contra los del poder económico -«los dos suelen ir, normalmente, juntos»-. Tiene un origen ético y no político. Por eso -añade el profesor Mollenhoff- tiene que ser estimulado en todo el mundo, aunque siempre hay que tratar de evitar la irresponsabilidad de su aplicación, porque de lo contrario pondría en peligro la reputación y credibilidad de toda la prensa.»

Aunque declara no conocer la situación española, el profesor Mollenhloff estima que el periodismo investigativo, científicamente planteado y correctamente aplicado, resultaría de gran utilidad, no sólo a los ciudadanos, sino también a los miembros honestos del Gobierno, como sucede en el resto de los países democráticos.