Jugadores de paja

Kubala dio a conocer ayer la lista inicial de cuarenta jugadores inscritos para el Mundial de Argentina y la desilusión tras verla supera con mucho su posible acierto. Se dice, y con razón, que cada aficionado tiene su equipo nacional particular, y también que difícilmente se puede contentar a todo el mundo, pero las deficiencias que se observan en la susodicha lista resultan evidentes ante cualquier aficionado sin colores. Por lo visto, el camino de la selección no se endereza nunca, porque sus rectores siguen empeñados en que se tuerza. Sólo la inspiración de siempre, «la lucecita» del genio español que se enciende en los momentos más inesperados, podrá evitar los peores males.El primer fallo importante en la relación de jugadores estriba en la absurda cantidad de representantes del Español -la del Betis ya es más disculpable, por su campaña europea- un equipo renqueante a más no poder esta temporada. Las presencias de Lanchas y Verdugo, concretamente, parecen intolerables, máxime después del simulacro de partido jugado contra Noruega.

Pero individualmente existen aún más cosas que sorprenden. Las llamadas de De la Cruz o Guzmán, por ejemplo, y la de Manzanedo, reserva en su equipo actualmente. En cuanto a la ausencia de Argote, el extremo bilbaíno, cuando incluso en su club se le prefiere al «semirecuperado » Rojo I, parece el ejemplo más claro de un conservadurismo increíble. La baza de un extremo-extremo como hacía tiempo no se veía por el fútbol español le debe resultar demasiado arriesgada al seleccionador por la juventud del muchacho. Cabe preguntarse entonces, ¿por qué se cita a Gordillo? ¿En qué es inferior ahora mismo Argote a Marañón? El que se llame del Athletic a Rojo I y Carlos -no digamos a Villar- y se olvide la gran revelación de este año es imperdonable. Ante tanta cita españolista se nota que el seleccionador vive en Barcelona y no en Bilbao. Lo malo es que sólo él ve jugadores de paja aprovechables.