Las exposiciones en Barcelona
En esta crónica desde Barcelona se comentan tres exposiciones de especial relieve: las de Jorge Castillo -en cinco salas-, los últimos grabados de Picasso y la que sobre la Bauhaus se muestra en la Fundación Joan Miró.El joven Castillo
La quíntuple exposición de Jorge Castillo en las galerías Dau al Set, Eude, Navarro, Joan Prats y Trece ha supuesto para este artista gallego-argentino-catalán un retorno oficial a su país y la recuperación de su figura, ya muy reconocida allende nuestras fronteras. Los tres amplios centenares de obra suya (pintura, dibujo, collage, obra gráfica y objetos), realizada entre 1958 y 1978, nos permiten entrar en contacto con su mundo de sueño, ficción e imaginación poética. En el fondo, Castillo es un narrador que, sugestionado por los recuerdos, las vivencias y las atmósferas de cada lugar, plasma sobre sus obras un mundo que oscila entre el sueño y la vigilia. Si originariamente se atuvo a módulos y formulaciones picassianas, a partir de 1976 la obra de Castillo recupera a través del realismo un corte más figurativo y menos biológico. El sueño se ha hecho más amable, la fuerza poética más transparente, el misterio más accesible. Los recuerdos, presagios y adivinaciones subsisten, pero las presencias se hacen más definidas y las ausencias más indeterminadas.
Sobre cualquier observación posible, la presencia de su obra conjunta, ejecutada con el mejor de los primores, ya en pintura, ya en dibujo, ya en gráfica, es realmente contundente. Castillo sabe transmitir algo íntimo en cualquiera de sus trabajos, sabe ser sarcástico y melancólico, misterioso y real, provocativo y amable a la vez, siempre con un toque de gracia y fluida agilidad.
El viejo Picasso
Por lo visto, Picasso dio la guerra hasta el último momento. Ya nonagenario, es capaz de seguir peleando, buril en mano, con los amplios recursos de la plancha calcográfica. Sus últimos 156 grabados originales (aguafuertes, puntas secas, aguatintas, maneras negras, grattoirs y frottages) son expuestos en la sala Gaspar como conmemoración de varios e importantes acontecimientos ligados a la picassiana ciudad de Barcelona, eventos que su viuda Jacqueline ha venido a subrayar con su presencia. Por una parte, esta exposición coincide con el quinto aniversario de la muerte del pintor; por otra, con el quinceavo aniversario del museo que lleva su nombre y con el medio siglo de existencia de sala Gaspar, la galería que más ha hecho para acercar la obra picassiana a la España de la dictadura, cuando éste era un artista anatematizado y proscrito. Gracias a los Gaspar, de modo regular, hemos podido saber de Picasso y de su obra sin esperar a las escapadas ultrapirenaicas.
Ahora, ante,estos grabados, reencontramos al eterno Picasso, su vital y variado cosmos de formaciones y deformaciones corporales y toda su particular mitología de personajes presidida por la imagen exultante de la mujer y la potencia erótica del artista. Aún nonagenario, se sentía dominado por ese empuje que supo arrancar de la vida y que transmitió a la obra de arte sin vacilación ni reservas.
La renovadora Bauhaus
La gran exposición Bauhaus que fue organizada por todo lo alto en Stuttgart en ocasión del cincuenta aniversario de la fundación de la famosa escuela alemana definidora del diseño, la arquitectura y las artes visuales del mundo moderno, ha llegado después de un largo periplo a España. En el marco de la Fundación Joan Miró y bajo el patrocinio del Instituto Alemán de Cultura se presenta, sobre una superficie aproximada de setecientos metros cuadrados, una completa exposición que incluye fotomontajes y objetos diversos, y documentación sobre los métodos de enseñanza habitualmente utilizados en los cursos de la escuela, tanto en los preliminares como en los relativos a las otras especialidades profesionales. Ocho pantallas de multivisión explican la interacción entre los desarrollos cultural y social de la época, situando los resultados de la famosa experiencia pedagógica en el marco de la Alemania que va de 1919 a 1933, en que fue clausurada por la policía nazi. Gropius y su equipo de primeras figuras, Kandinsky, Feininger, Albers, Itten, Klee, Schlemmer, Van der Rohe, Breuer... consiguieron formular un nuevo modelo de entorno que en el campo de la arquitectura, el diseño, el arte gráfico, el teatro y las mismas artes plásticas continúa teniendo vigencia.
