Rotas las negociaciones del convenio del calzado

A última hora de la tarde del miércoles el presidente de la mesa negociadora del convenio colectivo del calzado suspendió las deliberaciones al no haber acuerdo entre la parte empresarial y social en el modo de aplicar el aumento de la masa salarial. Poco después de conocerse este hecho, la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE), que está negociando en representación de los empresarios, hizo público un comunicado en el que manifestaba que «ante la divergencia de criterios sobre la masa salarial y la no admisión por parte social del nombramiento de un árbitro designado por ambas partes, tal como la contempla la vigente ley de relaciones laborales, se ha llegado a una situación real de no acuerdo que en todo momento la FICE ha tratado que no se produjera».

Aunque en realidad se trata de una suspensión por parte del presidente de la mesa, ya que ninguna de las dos partes deliberantes solicitó la ruptura, en medios de la patronal y de los trabajadores esta medida se interpretaba como una ruptura que viene a producirse en el momento en que los trabajadores iniciaban una huelga de veinticuatro horas de duración, precisamente como presión para conseguir sus reivindicaciones económicas.El punto de disensión entre las partes negociadoras ha sido la aplicación de la masa salarial. Mientras la patronal ofrecía un aumento lineal semanal de quinientas pesetas, la representación de los trabajadores pedía que este aumento fuera de 1.024 pesetas. El aumento ofrecido por la patronal se refiere tan sólo a la tabla salarial ajustada al pacto de la Moncloa, dejando al margen los incentivos para que sea cada empresa la que haga pactos posteriores sobre los mismos según su nivel de productividad.

Por su parte, los trabajadores rechazan esta postura porque consideran que entonces habría que firmar un convenio colectivo distinto en cada una de las más de 2.000 empresas que conforman el sector a nivel estatal.

Para elaborar su propuesta, hicieron un estudio económico referido a los salarios que se cobran en distintas empresas de tipo medio, salarios en los que ya se incluían los incentivos, siendo ahí donde aplicaron el aumento del 22 % establecido en los pactos de la Moncloa. Pero la patronal no acepta esta petición de aumentos salariales que piden los trabajadores porque consideran que esos aumentos rebasan los topes establecidos en los pactos de la Moncloa.

En medios de FICE, consultados por EL PAIS, se mencionó la posibilidad de que, como salida a la actual situación de suspensión de negociaciones, una de las partes deliberantes solicite la declaración de conflicto colectivo en el sector para llegar al acto de conciliación, y caso de que tampoco así hubiera resultado positivo llegar al laudo, segundo que se dictaría en el sector, ya que las anteriores negociaciones, el pasado mes de septiembre, concluyeron en laudo.

Aunque ninguna de las partes consultadas desean el laudo, lo cierto es que la otra alternativa posible, que empresarios o trabajadores solicitasen la reanudación de las negociaciones, no se veían como factibles, ya que, como apuntaron en medios de la patronal, «si ambas partes creen tener razón en sus planteamiento, para qué pedir reanudación de conversaciones, si éstas se iban a mantener en los mismos términos».

Por su parte, los trabajadores, durante la jornada de huelga de ayer, mantuvieron constantes asambleas.