La República Federal de Alemania incrementará sus inversiones en España
La Sociedad Alemana para el Desarrollo, dependiente en un 100% del Gobierno, y dedicada a la promoción exterior de las empresas de la República Federal de Alemania, va a invertir este año 35 millones de marcos en doce proyectos que se llevarán a cabo en España, según ha manifestado un portavoz de esta entidad a EL PAÍS.
Esta sociedad estatal, al servicio de grandes industrias alemanas, ha acordado elevar su capital de inversión de setecientos a mil millones de marcos para planes en vías de realización durante el presente año. Su competencia alcanza exclusivamente a los países del Tercer Mundo y a España, Grecia y Portugal.Según el portavoz, señor Neusutz, «existe un especial interés en el caso de España, tras conocer las actuales posibilidades inversoras que ofrece el país». La Sociedad Alemana para el Desarrollo mantiene en estos momentos proyectos en Badajoz (Motores Diesel), Valencia (embasados de cítricos), Zaragoza (fibras artificiales), Asturias (canteras) y Tenerife (proyectos no especificados, pero no relacionados con el turismo).
En cuanto a las condiciones que ofrece España para beneficiarse de esta presencia inversora alemana, el portavoz no ha especificado detalles. Tan sólo ha señalado que la visita del presidente Suárez, en noviembre, significó para la RFA un estímulo inversor. Como prueba de este interés, se consigna que mientras en 1976 la Sociedad Alemana para el Desarrollo invirtió en España 2,9 millones de marcos, este año la cifra se elevará a 35, cifra muy superior a los seis millones que corresponderán a Portugal y los diez de Grecia.
Por su parte, el director de la misma entidad, doctor Sohn, ha subrayado el papel que puede cumplir España como reinversor en los países latinoamericanos. Dado este interés, dice el doctor Sohn, Alemania Federal podría servirse de él para llegar hasta América del Sur. Esta posibilidad se verá muy favorecida con la reforma de la ley de impuestos, que favorecerá la inversión en el Tercer Mundo.
Esta ley y la intervención de la Sociedad Alemana para el Desarrollo, del Banco de Desarrollo de Francfort y de las grandes empresas privadas alemanas parecen garantizar una expansión del gran capital alemán en proporciones desconocidas hasta ahora en el sur de Europa y Tercer Mundo.
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