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Renfe acepta el pacto de la Moncloa

El pleno general de representantes de Renfe acordó ayer la aceptación de la limitación salarial que impone el pacto de la Moncloa, cara a la negociación que comienza hoy con la empresa para la revisión del convenio colectivo. Los trabajadores acordaron también reivindicar el reparto lineal del 50% de los 8.500 millones que aproximadamente supone de incremento salarial la aplicación del 22% que establece el pacto a la masa salarial de Renfe durante el pasado año.Aunque en la reunión mantenida ayer por el pleno general de representantes ferroviarios no se trató de las posibles acciones de fuerza que podrían adoptar los trabajadores en apoyo de la forma de reparto del incremento salarial que reivindican, así como de las demás mejoras de carácter social, el órgano de representación obrera de Renfe no descarta la posibilidad de llegar a una situación límite en las negociaciones que originara la adopción de determinadas acciones de protesta.Junto con el reparto, mitad por mitad, de forma lineal y proporcional de los referidos 8.500,millones de pesetas de incremento salarial, los representantes ferroviarios reivindican la fijación de una prima de producción mínima de 4.000 pesetas mensuales para el salario más bajo (tipo 9-peón), e incrementar esta cifra de trescientas en trescientas pesetas en cada tipo hasta el tipo 1, correspondiente a la categoría de jefe de servicio. La fijación de esta prima supone retraer 731 millones de pesetas de los citados 8.500 millones.

También se pretende retraer 301 millones para los conceptos de antigüedad y ascensos, con lo que quedarían disponibles para repartir al 50% de forma lineal y proporcional 8.213 millones de pesetas.

El 50% lineal iría incrementado en el salario como plus de convenio. Por otra parte, de los millones a repartir proporcionalmente, 1.100 se destinarían a fijar los cuatrienios en un 6% (actualmente están en un 5%), y el resto se repartiría entre el Sueldo base -que quedaría incrementado en un 11,7%- y en sus repercusiones, congelando los demás conceptos.

Esta reivindicación obrera persigue reducir el número de horas extraordinarias, -ya que se sube su precio -por ser una repercusión del sueldo base- mientras que se congela el monto a ellas destinado.

Entre las reivindicaciones sociales, destaca la participación obrera en los comités de personal y de compras, así como en la contabilidad de la empresa. Se solicita, asimismo, la supresión de la circular 210, que supone un « reglamento de sanciones para los maquinistas» y la inclusión en el convenio de los trabajadores excluidos.

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