Los trabajadores de Babcock ofrecen un ultimatum negociador a empresa y Administración

Un documento en el que se detallan una serie de puntos básicos planteados por los trabajadores de Babeock Wilcox con objeto de iniciar negociaciones sobre el futuro de la empresa fue enviado por los representantes de éstos a los Ministerios de Industria, Hacienda y Trabajo, así como al presidente del INI y a la dirección del Banco de Vizcaya, banco que cuenta con un 10 % del capital.De acuerdo con el plan de negociación propuesto por los trabajadores, calificado por sus representantes como «última posibilidad antes de tomar decisiones irreversibles», los puntos a tratar son los siguientes: análisis de las posibilidades de acordar una moratoria de los acreedores; nombramiento de un interventor del - Estado que supervise las decisiones adoptadas por la dirección de la empresa iniciación de un estudio de valoración de los activos y pasivos de la Babcock, y la redacción de un plan de reestructuración de la sociedad del que salga garante el INI, organismo que se haría cargo de la empresa si las medidas no fuesen efectivas.

La propuesta realizada por los trabajadores señala una serie de acuerdos que habrán de adoptarse con anterioridad al comienzo de las negociaciones, como son una clara voluntad de negociar la instrumentalización de un apoyo económico, con el fin de normalizar el pago de las nóminas durante el tiempo de negociación suspender cualquier clase de decisión por parte de la empresa y que comprometa el futuro de la misma, como la venta de activos y la suspensión de pagos, y la formación de una comisión negociadora compuesta por cuatro representantes de la Administración, cuatro de la dirección de la empresa, dos de la banca privada, seis de los trabajadores y dos de las comisiones de Industria y Hacienda de las Cortes.

De acuerdo con la información facilitada por los trabajadores, la empresa adeuda 160.000 pesetas por término medio a cada productor. Igualmente señalaron que en la actualidad son dos las empresas -una guipuzcoana y otra vizcaína- las interesadas en la compra de parte de la sociedad para lo cual se están manteniendo negociaciones.

Estas empresas -al parecer se trata de Arbulu y Luzuriaga adquirirían por 6.000 millones de pesetas la planta de tubos y la siderúrgica de Babcock. Con esta cantidad podrían cubrirse parte de las pérdidas y compromisos financieros adquirídos por la empresa. La parte siderúrgica y de tubos emplea unos 1.600 trabajadores.