El PSOE, de lo vivo a lo pintado
Redactor del diario marroquí L'Opinion
El PSOE que, según sus portavoces, «tiene una política propia de apoyo a la libre determininación de los pueblos (incluidos el saharaui), con la que el régimen de Argel coincide», ha juzgado oportuno responder, seis días después que la embajada argelina, a mi artículo «El Sahara y el error de la izquierda española» publicado en EL PAIS el 7-10-77.
Esta réplica del señor Luis Yáñez, secretario de relaciones internacionales del PSOE y Emilio Menéndez del Valle, de la comisión internacional de dicho partido, contiene numerosas inexactitudes y contraverdades que merece la pena señalar a los lectores de EL PAIS.
1. Cuando los señores Yáñez y Menéndez del Valle evocan el caso de Ben Barka, se guardan muy bien de mencionar el de los líderes históricos de la revolución argelina eliminados en el exilio, como Mohamed Jider (asesinado, precisamente, en Madrid) y Krim Belkacem (en Francfort). Más notable aún: tampoco mencionan el caso de Ben Bella, detenido sin proceso alguno desde hace más de doce años en condiciones inhumanas.
2. Tomo nota con satisfacción del hecho de que "el PSOE no cierra los ojos ante las conflictivas situaciones de Ceuta y Melilla y se prepara para afrontarlas en su momento». Pero ¿cuándo? ¿Para el momento en que todo se haya zanjado sin su intervención, como en el caso del Sahara?
Con todo, no podemos olvidar que durante su congreso de diciembre de 1976, el PSOE decidió, como señalaba EL PAIS al dar cuenta del mismo, «garantizar la españolidad» de los dos enclaves. Permítaseme preguntar a Yáñez y Menéndez del Valle: ¿Es esto una manera de afirmar la vocación tercermundista del PSOE y de asumir sus responsabilidades?
3. Nos es grato saber que «en la base del PSOE, como dicen Yáñez y Menéndez del Valle, crece cada día más la preocupación por la suerte del pueble, palestino». Lo malo es que la dirección del partido se inclina abiertamente a favor de la entidad sionista, como lo muestra el viaje del secretario general del PSOE a Tel-Aviv.
4. Al evocar la tradición anticolonialista del PSOE, sus dos dirigentes se detienen. en... 192 1. Y la razón es obvia. Pues les sería difícil reproducir los hechos y palabras no sólo colonialistas, sino abiertamente racistas de algunos de los líderes del PSOE durante la sangrienta «pacificación» del Rif, entre 1931 y 1936.
5. Los señores Yáñez y Menéndez del Valle fingen ignorar la política hegemonista de Argel en el Maghreb, política de la que el Polisario y el MPAIAC son simples peones. Sin necesidad de recordarles ahora los ácuerdos secretos de Bumedian con el régimen franquista, les refrescaré la memoria evocando, como el socialista canario Salvador Sagaseta, la idea de la «federación Canarias-Sahara » lanzada hace algunos años por Cubillo con la bendición de Argel: «Se trataba, de parte argelina, de inclinar definitivamente a su favor la balanza de la lucha por la hegemonía en el Maghreb, instaurando en el Sahara occidental un régimen políticamente afín y cerrando también el cerco político a Marruecos a través de su frontera canaria».
6. Los señores Yáñez y Menéndez del Valle silencian del todo la resolución del pueblo marroquí en torno al conflicto con Argel. Me atrevería a aconsejarles que leyeran, por ejemplo, lo que dice el periodista francés Christian Casteran en el periódico socialista Le Matin del 28-10-77. En lo que concierne al Sahara, escribe, «su defensa se ha convertido en un deber patriótico que nada tiene que ver con la ideología. Es sorprendente comprobar hasta qué punto se ha forjado una unanimidad en Marruecos en tomo a este tema. De la derecha a la izquierda socialista y comunista o incluso a la extrema izquierda maoista, no hay un solo marroquí que, sobre este punto concreto, no esté de acuerdo con la política de Hassan ll».
8. Finalmente, me permitiré observar que cuando los señores Yáñez y Meriéndez del Valle me dicen: «Nos gustaría tener algún día la oportunidad de publicar nuestros puntos de vista en L'Opinion, de la misma manera que ha podido usted publicar los suyos en EL PAIS, ¿se proponen tomar el pelo a sus lectores? EL PAIS, si no me equivoco, es un diario independiente que nada tiene que ver con el PSOE. Así, en lugar de apropiarse de lo que no les pertenece, Yáñez y Menéndez del Valle habrían hecho mejor extendiéndo me su invitación, por ejemplo, al semanario El Socialista, que sí es un órgano del PSOE y donde el punto de vista marroquí sobre la cuestión no ha sido expuesto nunca.
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