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Josep Tarradellas, gravemente enfermo

El presidente de la Generalitat de Cataluña permanece internado en la clínica San José, de Barcelona, en un estado que fue calificado médicamente a EL PAIS, de «grave», si bien a últimas horas de ayer parecía apreciarse una mejoría. Tarradellas fue internado en aquel centro en la mañana de ayer. Fue trasladado al mismo en una ambulancia. El enfermo guardaba cama desde la madrugada del viernes, al parecer aquejado, inicialmente, de una «afección gripal".

No obstante, el diagnóstico actual de su dolencia es bronconcumonía séptica, acompañada de una Importante baja de la presión sanguínea. En la mañana de ayer se temía que ello produjera un shock séptico. En la tarde de ayer el presidente de la Generalitat se encontraba consciente en la habitación número veintiséis de la citada clínica. Respiraba a través de una mascarilla de oxígeno y recibía medicación a través de sueros gota a gota, conectados a su brazo izquierdo. Fuentes responsables señalaron que Tarradellas tardará, por lo menos, dos o tres días en salir de esta situación de peligro.Dos hechos clínicos preocupaban particularmente: la hipotensión y la anuria (imposibilidad de orinar). Respecto a la tensión, ésta era de tan sólo ocho de máxima en la mañana de ayer, pero subió a diez posteriormente. Con relación a la anuria se indica que la imposibilidad de orinar era total en, la madrugada y parte de la mañana de ayer, lo cual podía motivar una insuficiencia renal de carácter extremadamente grave, incluso posiblemente irreversible.

Ambos datos eran considerados anoche como muy positivos. pero no permitían modificar el calificativo médico de «grave».

Pasadas las ocho y media de la tarde de ayer sábado, el gabinete de prensa de la Generalitat de Cataluña hizo pública la siguiente nota oficial:

«El presidente de la Generalitat de Cataluña, honorable señor Josep Tarradellas, continúa internado en la clínica de Barcelona a la que fue trasladado esta mañana. Se ha diagnosticado una afección pulmonar acompañada de una moderada insuficiencia renal, las cuales adecuadamente tratadas están evolucionando satisfactoriamente.»

El señor Tarradellas firmó poco antes de las ocho de la tarde de ayer. en la clínica donde se encuentra internado, un decreto por el que nombra al que fue su delegado en el interior de Cataluña hasta su regreso, Frederic Rahola, conseller (ministro) de la Presidencia de la Generalitat.

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El presidente de la Generalitat padece bronconeumonía séptica

(Viene de primera página)

El señor Rahola entró a formar parte de la secretaría de Finanzas de la Generalitat en 1936, cuando la citada consellería estaba a cargo de Marti Esteva. Josep Tarradellas le nombró su secretario durante la guerra y en 1942 regresó a Cataluña y se dedicó a su profesión de abogado. En octubre de 1976 fue nombrado presidente del organisme consultiu del presidente Tarradellas y desde entonces ha sido representante del presidente de la Generalitat en el interior de Cataluña.

Las informaciones oficiales facilitadas a EL PAIS tenían un carácter radicalmente opuesto a las obtenidas de otras fuentes, en extremo fidedignas. La versión oficial continuaba siendo la de una «ligera afección gripal motivada en parte por el cansancio», la cual no concordaba con la realidad clínica del presidente Tarradellas en el día de ayer.

El comunicado emitido, en la mañana de ayer, por el gabinete de prensa de la Generalitat no citaba la palabra «bronconeumonía» y afirmaba simplemente: «Los médicos que le atienden (al presidente de la Generalitat) han considerado procedente. para que disponga de mejores atenciones y medios de tratamiento, incluso como precaución ante cualquier eventualidad, que el presidente sea trasladado a la clínica San José, de Barcelona. donde continuará el proceso de recuperación».

Fuentes médicas indicaron que en el caso de que el proceso de recuperación fuese óptimo, Tarradellas debería convalecer por un período mínimo de dos 0 tres semanas, en el que debería estar sometido a un fuerte tratamiento con antibióticos. Es de recordar que Tarradellas cumplió 78 años el pasado mes de enero.

El enfermo está sometido a los cuidados del mismo equipo médico que le atendió en días pasados, compuesto por los doctores Martí Feced, Cuatrecasas Aromi y Ferrer Soler, al que se sumó el ya mencionado Revert Torrellas, en condición de nefrólogo.

Por el estado de Tarradellas se interesaron directamente políticos de los más variados horizontes: Martín Villa, López.-Raimundo, Joan Reventós, Felipe González, Socías-Humbert, entre otros, así como el capitán general de la IV Región Militar, teniente general Francisco Coloma Gallegos.

En el orden político es de destacar que los decretos restableciendo la Generalitat y nombrando presidente de la misma a Josep Tarradellas no previeron la posibilidad del cambio de titularidad en la presidencia. En principio, la sustitución de Tarradellas será automática cuando entre en funciones el futuro Parlamento autónomo catalán, cuya elección la determinará el futuro estatuto de autonomía, a promulgar por las Cortes no antes de dos años.

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