El proyecto de ley sobre control parlamentario irá al Pleno sin modificaciones

En el último día de su presencia en el palacio de la carrera de San Jerónimo, de la Cámara Alta -hoy se produce el paso definitivo al palacio del antiguo Senado-, y con los senadores socialistas como testigos mudos, la comisión senatorial de Presidencia del Gobierno y Ordernación General de la Administración Pública, dictaminó ayer el proyecto de ley sobre control parlamentario, ya aprobada en su día por el Congreso de los Diputados, y que se atascó en el último Pleno del Senado, al no obtener los dos tercios de votos favorables requeridos.El debate consistió en una pugna dialéctica entre la mayoría de la ponencia (los señores López Henares, Harguindey y Nieves Borrego, todos ellos de UCD) y los senadores del PSI, señores Martín Retortillo (ponente también) y Villar Arregui, portavoz del grupo.

Los doce miembros de UCD en la Comisión votaron favorablemente todos los artículos, mientras que los cinco socialistas, ninguno de los cuales intervino en los debates, se abstuvieron, y los dos senadores del PSI votaron casi siempre en contra. Otros grupos más reducidos de senadores, como los independientes, unieron sus votos a uno u otro sector, según los casos.

El portavoz de los socialistas, Francisco Ramos, nos explicó después la actitud de su grupo en función de la inutilidad práctica de oponerse a un proyecto de ley contra el que los socialistas va se emplearon a fondo en el Congreso y contra el que ahora con, el cálculo de los votos delante, no se podía hacer nada.

Por lo que se refiere a los artículos quinto y sexto, los más enmendados, los senadores del PSI mantuvieron que la moción de censura pudiera ser tramitada y aprobada porcualquiera de las dos Cámaras, sin necesidad de someterla, sucesivamente, a ambas ni de recurrir a una sesión conjunta ante la posible discrepancia entre el Conoreso de Diputados y el Senado. «Si el Gobierno ha de contar con la confianza de una v otra Cámara, bastará la censura por parte de una de ellas». argumentó el señor Víllar Arregui, quien se mostró reticente hacia la disciplina de los senadores y los pactos avalados por la Moncloa y, los partidos políticos.

El Pleno, el día 10

La Mesa del Senado se reunió ayer por espacio de dos horas en el palacio de la plaza de la Marina Española. Al término de la sesión, el presidente de la Cámara, señor Fontán, señaló que es previsible que el presidente del Gobierno intervenga ante el Pleno de la Cámara, convocado para el próximo día 10 a las cinco de la tarde, y que continuará el día 11.

El discurso del presidente Suárez -agregó- se producirá. si hubiera luizar, para explicar el alcance de los acuerdos logrados en el denominado pacto de la Moncloa. El asunto fue abordado va por la junta de portavoces en su última reunión. Si no interviniese el jefe del Gobierno lo haría algún miembro del mismo.

La Mesa acordó también proponer a la junta de portavoces, que se reúne hoy a la una de la tarde, el orden del día de la sesión plenaria del próximo jueves.