Declaraciones de José María de Areilza

¿Podría hacer en síntesis una autocrítíca de Diario de un ministro de la Monarquía?-Es un relato vivido de doscientos días de un Gobierno que trataba de pasar de un sistema autocrático a uno democrático. En él hay cosas que salieron bien, cosas que salieron mal y cosas que no salieron. Una serie de narraciones que explican por qué determinadas iniciativas no pudieron ser llevadas acabo.

¿Quién fue el responsable de que tales iniciavas no pudieran ser llevadas a cabo?

Para ser justo, he de decir que el contexto político fue el verdadero responsable. La muerte de Franco estaba muy cercana, la subsistencia de ciertas instituciones y personas del régimen que él encarnó estaban más cerca aún, de tal manera que no se podía ir más lejos ni más deprisa.

-¿Por qué el presidente Suárez aparece tan favorablemente tratado en su libro, si en su momento las relaciones entre usted y él fueron puestas en tela de j uicío?

. -El libro está escrito al filo de los acontecimientos y no ha sido en manera alguna manipulado. En realidad en el libro sale sólo en tres o cuatro ocasiones y, aunque yo no tenía una gran confianza política con él, nos llevábamos muy bien en las relaciones interministeriales.

-¿Habría alguna razón poderosa y definitiva que desconozcamos, por la cual no figuró su nombre en la terna para ser presidente del Gobierno y que, por otra parte, saliera elegido precisamente Adolfo Suárez?

-No he explicado esas razones porque equivaldrían a un capítulo entero, pero de un nuevo libro, que posiblemente escribiré algún día. Pero dada la composición que tenía entonces el Consejo del Reino era lógico que mi nombre no figurase en la terna de los candidatos. Y en segundo lugar, porque para desmontar frontalmente las instituciones del franquismo había que buscar una persona que proviniese precisamente del franquismo y que conociese en profundidad los entresijos del régimen; y quiero rendir tributo a la justicia desdeaquí, diciendo que la verdad es que Suárez lo ha llevado todo de manera enormemente hábil y muy acertada. ( ... )

-¿Cree, sin embargo, que lo que realmente se está pactando en estos momentos en la Moncloa es el futuro del país? ¿Cree que dicho pacto cristalizará en algo definitivamente positivo y favorable para los españoles? .

-Me parece que el propósito de esas «cumbres» de la Moncloa es de gran envergadura, pero habrá que esperar unos meses para ver cómo cristaliza. Porque una cosa es el propósito y otra el resultado práctico del mismo. Ahora sólo puedo decirle que en mi condición de español sólo deseo que sea un pacto auténtico que se pueda poner en práctica con todas las consecuencias favorables. ( ... )

Barcelona, 29 octubre